¿QUÉ ES LA FE? LA FE ABARCA LA VERDAD, EL CORAJE, LA SABIDURÍA Y LA BUENA FORTUNA. INCLUYE LA COMPASIÓN Y LA HUMANIDAD, ASÍ COMO LA PAZ, LA CULTURA Y LA FELICIDAD. LA FE ES ESPERANZA ETERNA; ES EL SECRETO PARA EL AUTO-DESARROLLO SIN LÍMITES. LA FE ES EL PRINCIPIO BÁSICO DE CRECIMIENTO. (LAS DISCUSIONES SOBRE LA JUVENTUD, VOLUMEN 2, PÁGINAS 163/64).

¿QUÉ ES EL BUDISMO? ES EL NOMBRE DADO A LAS ENSEÑANZAS DE UN BUDA. "BUDA" SIGNIFICA "EL ILUMINADO”; ALGUIEN QUE PERCIBE LA ESENCIA O REALIDAD DE LA VIDA EN SU INTERIOR, ES UN SER ILUMINADO A LA VERDAD DE LA VIDA Y DEL UNIVERSO. A DIFERENCIA DE OTRAS RELIGIONES, EL BUDISMO NO ALEGA UNA REVELACIÓN DIVINA. COMIENZA CON UN HOMBRE, QUE A TRAVÉS DE SUS PROPIOS ESFUERZOS Y PERSEVERANCIA, DESCUBRIÓ LA REALIDAD DENTRO DE SÍ Y ENSEÑÓ QUE TODOS PODÍAN HACER LO MISMO. EL BUDA NO PUEDE SER DEFINIDO, COMO UN SER TRASCENDENTAL O SUPREMO. EN ESTE SENTIDO, EL BUDISMO, NO SOLO ES LA ENSEÑANZA DE UN BUDA, SINO LA ENSEÑANZA QUE POSIBILITA A TODAS LAS PERSONAS REVELAR SU NATURALEZA DE BUDA. EL BUDISMO ES UN SISTEMA PRÁCTICO DE ENSEÑANZA QUE NOS PERMITE CONCRETAR EL ESTADO IDEAL DE LA BUDEIDAD… LA PROPIA PERFECCIÓN.

¿QUE ES EL KOSEN-RUFU? “ES LA LUCHA PARA TRANSFORMAR LA VIDA DE LOS SERES HUMANOS, REVIRTIENDO LA OSCURIDAD QUE RESIDE EN EL INTERIOR DE SU VIDA, HACIENDOLO TOMAR CONCIENCIA DE SU NATURALEZA DE BUDA INHERENTE". LA ESENCIA DE “ESTABLECER LA ENSEÑANZA CORRECTA PARA ASEGURAR LA PAZ EN LA TIERRA” ESCRITO POR NICHIREN DAISHONIN, RADICA EN CONSTRUIR UNA RED DE PERSONAS DEDICADAS AL BIEN. PERO COMO ESTA CONTIENDA IMPLICA TRANSFORMAR DE RAÍZ LA VIDA DE LAS PERSONAS PROVOCARA RESISTENCIA EN CIERTOS SECTORES… ESTA GRAN BATALLA ES LA CLAVE PARA CREAR UN MUNDO DE PAZ Y DE FELICIDAD VERDADERAS, UNA TIERRA DE BUDAS.

YIGUIO Y KETA. PRÁCTICA PARA UNO MISMO Y PRÁCTICA PARA LOS DEMÁS. ESTOS ASPECTOS DEL BUDISMO VERDADERO SON: YIGUIO (PRÁCTICA PARA UNO MISMO) Y KETA (PRÁCTICA POR EL BIEN DE OTROS). AMBOS CONSTITUYEN UNA PRÁCTICA COMPLETA. SON COMO DOS RUEDAS QUE FUNCIONAN AL UNÍSONO PARA ADELANTAR NUESTRAS VIDAS, PARA MANIFESTAR NUESTRA ILUMINACIÓN INHERENTE.

¿QUE ES LA SOKA GAKKAI INTERNACIONAL (SGI)?...ES UNA ORGANIZACIÓN BASADA EN EL BUDISMO DE NICHIREN DAISHONIN, INSPIRADA EN EL RESPETO A LA VIDA, LA CONCIENCIA DE LOS DERECHOS HUMANOS, BUSCANDO DESPERTAR EN LAS PERSONAS EL ESPÍRITU DE RECONOCER, RESPETAR Y APRECIAR LAS SEMEJANZAS Y LAS DIFERENCIAS, PERMITIENDOLES FORTALECERSE Y TRANSFORMAR SU INTERIOR PARA DESARROLLAR SU MÁXIMO POTENCIAL, ASUMIENDO LA RESPONSABILIDAD DE SU PROPIA VIDA Y COMPROMETIENDOSE CON LA SOCIEDAD, EMPRENDER ACTIVIDADES EN SU VIDA COTIDIANA, PARA DESPLEGAR LA CAPACIDAD DE VIVIR CON CONFIANZA, CREANDO VALOR EN CUALQUIER CIRCUNSTANCIA Y CONTRIBUYENDO AL BIENESTAR DE AMIGOS, FAMILIARES Y SU COMUNIDAD…

…UNA DE LAS DIFICULTADES QUE LOS LATINOS TIENEN PARA COMPRENDER EL BUDISMO, radica en lo que el término "religión" significa en su ámbito social… Las religiones occidentales tienen sistemas jerárquicos en los que las reglas y los dogmas se establecen desde arriba hacia abajo… Ellas están basadas en la creencia de una deidad sobrenatural… La relación entre el maestro y el discípulo es interpretada como la de una persona que ciegamente, sigue a otra… VER MAS…

EL ESFUERZO DE NO RENDIRSE JAMAS. Vivimos una vida fragmentada y llena de conflictos. Estamos divididos en centenas de grupos de seres humanos, limitados por el miedo, la vergüenza, la culpa, la ira, las obsesiones y las emociones… esta lucha interna hace que no nos podamos entender… ¿Por que pasa esto...? VER MAS…

LA RECITACION DE LOS CAPITULOS “MEDIOS HABILES” Y “DURACION DE LA VIDA”. Carta a la esposa de Hiki Daigaku Saburo Yoshimoto. Este Ghoso, nos acerca a un precepto conocido como “seguir las costumbres de la región”. El significa que, mientras no esté en juego ninguna trasgresión grave, no se debe ir contra las tradiciones y costumbres de un país, región o comunidad, aunque debamos apartarnos ligeramente de las enseñanzas. Este criterio fue establecido por el Buda... VER MAS…

LAS REUNIONES DE DIALOGO O ZADANKAI, SON UN OASIS…En la actualidad, el egoísmo desmedido, provoca profundos trastornos en el corazón humano y estamos perdiendo la coexistencia con la naturaleza; por ello estos mini cónclaves de miembros de todas las edades, razas, intereses y antecedentes, son un foro de intercambio rico y refrescante. En un mundo afectado por la "DESERTIFICACION SOCIAL", estas reuniones son un oasis, en el que los seres humanos en forma individual, se esfuerzan en concretar la paz mundial y la prosperidad de la sociedad humana. ...Como budistas, al establecer una condición de paz interior en la vida cotidiana, contribuimos con la paz del mundo, posibilitando a cada uno, desarrollar su potencial inherente... VER MAS…

EL SUTRA DEL LOTO, SUS 28 CAPÍTULOS. (Compilado de las 53 entregas del Presidente Daisaku Ikeda.)




Los 28 capítulos del Sutra del Loto (en sánscrito Saddharmapundarikasutra):

1. Introducción.

2. Medios hábiles.

3. Parábolas y semejanzas.

4. Creencia y comprensión.

5. Parábola de las hierbas medicinales.

6. La anunciación de profecías.

7. La parábola de la ciudad fantasma.

8. La profecía de iluminación a los quinientos discípulos.

9. Profecía a adeptos y aprendices.

10. Maestro de la Ley.

11. El surgimiento de la Torre de los Tesoros.

12. Devadatta.

13. Aliento a la devoción.

14. Prácticas pacíficas.

15. Irrumpir de la Tierra.

16. Duración de la vida de El Que Así Llega.

17. Distinciones de beneficios.

18. Los beneficios de responder con alegría.

19. Los beneficios del Maestro de la Ley.

20. El bodhisattva Jamás Despreciar.

21. Poderes sobrenaturales de El Que Así Llega.

22. La transferencia.

23. Asuntos pasados del bodhisattva Rey de la Medicina.

24. El bodhisattva Sonido Maravilloso.

25. El pórtico universal del bodhisattva Percibir los Sonidos del Mundo.

26. Dharani.

27. Asuntos pasados del rey Adorno Maravilloso.

28. El aliento del bodhisattva Sabio Universal.

   El primer volumen del Sutra contiene dos capítulos: “Introducción” y “Medios Hábiles”. El capítulo “Introducción” sirve de prologo a los veintiocho de los cuales consta el Sutra.
   Los ocho capítulos que van desde “Medios Hábiles” hasta “Profecía a adeptos y aprendices” se ocupan, en primera instancia, de esclarecer como pueden lograr la iluminación las personas de los dos vehículos y secundariamente, de aclarar como pueden hacerlo los bodhisattvas y las personas comunes.
   Los siguientes cinco capítulos –“Maestro de la Ley”, “El surgimiento de la Torre de los Tesoros”, “Davadatta”, “Aliento a la devoción” y Practicas pacíficas” – explican de que manera las personas comunes de la última época tendrán que practicar las enseñanzas expuestas en los ocho capítulos anteriores.
   El capítulo posterior, “Irrumpir de la tierra” sirve de introducción a “Duración de la vida”. Y los doce siguientes, contados a partir de “Distinciones de Beneficios”, sirven principalmente para explicar de que manera deberán practicar llas doctrinas del capítulo “Duración de la vida” las personas comunes del Ultimo Día y, en segundo término, para establecer como deberán ser mantenidas las practicas expuestas en los ocho capítulo contados a partir de “Medios Hábiles”.
   Por lo tanto el capítulo “Rey de la medicina” explica como hay que practicar las enseñanzas de los ocho capítulos – contados a partir de “Medios Hábiles”- y las del capítulo “Duración de la vida”.  

EL SUTRA DEL LOTO. SUS 28 CAPITULOS.

CAPÍTULO UNO. INTRODUCCIÓN (DLS  4/5)
   Este es el capítulo inicial del Sutra del Loto y comienza, como lo hace la mayoría de los sutras, con la frase “Esto es lo que yo escuché”.
   La congregación es presentada con el Pico del Águila como escenario. Hay una vasta asamblea de bodhisattvas, hartas(1), personas de los dos vehículos, humanos, reyes, dioses, seres animales, demonios y otras criaturas. El Buda es asistido por decenas de miles de discípulos y seguidores de diversos niveles de iluminación. El sutra informa que Shakyamuni predicó el Sutra de los Infinitos Significados y luego ingresó en una profunda meditación llamada “el samadhi del lugar de los infinitos significados”.
   Surge una discusión entre los bodhisattvas representativos de la gran diversidad de la asamblea que se ha reunido en medio de los maravillosos fenómenos que se despliegan mientras el Buda está en profunda meditación. Ellos están de acuerdo en que todos son presagios de que el Sutra del Loto está por ser predicado. De manera similar, nosotros debemos buscar prodigios más profundos para nuestra propia vida conforme leemos el Sutra del Loto. El presidente Ikeda nos pide ser cuidadosos porque los eventos se están desarrollando en muchos niveles.
   El señor Toda no quería que el Sutra del Loto fuese tomado como una historia fantasiosa, alejada de la realidad. Ni que se creyera que el Budismo era una abstracción inconsistente. Por otro lado, estaba convencido de que el Sutra del Loto y el Budismo no tenían nada que ver con la fantasía ni con la abstracción. Sabía positivamente que el Sutra del Loto era la Ley de la vida, la Ley que existe en lo profundo de cada persona.
   Es una película, de dimensiones colosales, proyectada sobre la pantalla del universo entero. Todo el cosmos es el escenario del Sutra del Loto; todos los budas han logrado su iluminación basados en la Ley Mística. Y es el Sutra del Loto el que revela esa Ley fundamental, Nam-myoho-renge-kyo. Como preludio a la presentación de dicha Ley, suceden presagios sorprendentes en gran cantidad. (Seikyo Times, setiembre de 1995, pág. 23)
   En la Introducción, los principales bodhisattvas compartieron sus experiencias del Sutra del Loto que habían sido predicados muchas veces en el pasado de diversas maneras. En este entorno, ellos comparan y correlacionan las muchas apariciones de los budas y las diferentes formas en que fue expuesto el Sutra del Loto- Esto es abarcado por el término “Sutra del Loto universal”.
   La verdad suprema es una sola, pero se la expresa de muy diversas formas. No obstante ello, todas estas formas son el Sutra del Loto. El Sutra del Loto universal es la enseñanza en la cual un buda revela y hace accesible a la gente la Ley con respecto a la cual él mismo está iluminado, la Ley para poder lograr la Budeidad, de tal forma que las personas logren la auténtica felicidad y la tranquilidad. (Seikyo Times, setiembre de 1995, pág. 25)
   Después de esto, ellos vuelven su atención a la frase inicial, “Esto es lo que yo escuché” o “Así oí yo”. Como siempre, con nuestro estudio del Sutra del Loto, aprendemos que la más corta de las expresiones puede estar cargada de profundos significados. Los participantes en el diálogo exploran profundamente el significado de “Esto es lo que yo escuché”. En el Pico del Águila, en el año 475 a.C., la audiencia de Shakyamuni estaba compuesta principalmente por discípulos llamados “los que escuchan la voz”. Como monje o monja, la persona estaba en un camino en el reino del aprendizaje. La meta de Shakyamuni era hacer que estos discípulos se automotivaran para transformarse como bodhisattvas y que actúen con la misericordia del Buda.
   En el texto del sutra, “Esto es lo que yo escuché” se refiere a las palabras del discípulo Ananda, quien era un asistente personal de Shakyamuni y estaba siempre presente y escuchando la prédica del Buda. Ya sabemos que hay múltiples niveles en los cuales se puede interpretar la enseñanza. El presidente Ikeda explica:
El Daishonin aplica el principio de “texto, significado e intención”. “Texto” se refiere al contenido literal del sutra. “Significado” indica la doctrina o principio que dicho texto refleja. Cuando uno se restringe a examinar sólo el aspecto literal de una escritura, se queda en el umbral del "significado".
   Pero de nada sirve analizar en detalle el “texto” y el “significado” del Sutra del Loto, si no llegamos a su corazón, es decir, a su verdadera “intención”. El Daishonin llega a la conclusión de que “’La sustancia de la doctrina’ no es otra que Nam-myoho-renge-kyo” (Gosho Zenshu, pág. 709).
   No debemos leer el sutra como si fuera algo separado de nosotros mismos. En cambio, deberíamos “escucharlo” para “aplicarlo a nuestra propia vida”, como la “mismísima Ley de nuestro propio ser”. (Seikyo Times, setiembre de 1995, págs. 27-28)
   El presidente Ikeda continúa para aclarar que la conexión más profunda que atraviesa “Esto es lo que yo escuché” es el vínculo de maestro y discípulo:
La esencia de “Esto es lo que yo escuché” es la inseparabilidad entre el maestro y el discípulo. Y esta es la quintaesencia de la transmisión budista.
En esta gesta humana que es la relación de maestro y discípulo, existe mutua consonancia y respuesta entre el deseo de un buda de salvar a todas las personas y el deseo del discípulo que quiere corporificar y propagar las enseñanzas de su maestro. Y el epítome de esta coincidencia es la frase “Esto es lo que yo escuché”. (Seikyo Times, setiembre de 1995, pág. 28)
   NOTAS
   1. Arhat: Un “digno”, alguien que ha alcanzado el más elevado estado de iluminación del Hinayana. El Sutra del Loto insta a rechazar la meta de un arhat y, más bien, esforzarse por el más elevado estado de iluminación, el de la Bude

CAPÍTULO DOS. MEDIOS HÁBILES (DLS 6/9)
   El capítulo “Medios hábiles” es el capítulo más importante de la primera mitad (capítulos 1-14) del Sutra del Loto. El inicio del capítulo explica que la sabiduría del Buda sólo puede ser comprendida por los budas y aclara la razón del advenimiento de un buda en un mundo para “abrir la puerta de la sabiduría del Buda a todos los seres vivientes”.
   Después de esta declaración del buda Shakyamuni, Shariputra le suplica que explique más. El Buda se rehusa debido al potencial para la calumnia entre aquellos que rechazan el sutra. Después de la tercera súplica, el Buda acepta predicar este maravilloso sutra. La esencia de la revelación hecha por Shakyamuni es que hasta este punto de sus enseñanzas, ha habido tres vehículos o maneras de autodesarrollo: los mundos de Aprendizaje, Realización y Bodhisattva. El Buda rechaza esta idea y dice que sólo hay un vehículo, la Budeidad. Reafirmando esto varias veces, Shakyamuni explica lo extraordinario que es que alguien pueda escuchar acerca del Vehículo Único.
   El punto de “Medios hábiles” es que estos son mecanismos de enseñanza que pretenden conducir al oyente a una comprensión más extensa. Aún más, la transformación necesaria es la de despertar realmente el corazón hacia la misericordia genuina y luego luchar para desarrollar el coraje para actuar basado en ello. “Medios hábiles” es el método educacional perfecto para mostrarle a la gente cómo revelar su propia naturaleza de Buda. El presidente Ikeda dice:
   En el capítulo “Medios hábiles”, Shakyamuni dice: “He expuesto mi enseñanza a través de diversas causas y de diversas analogías”. El Buda emplea diferentes causas y analogías, según sea la capacidad de quienes lo escuchan, para conducirlos al camino correcto. Esta capacidad del Buda se denomina “el poder de los medios hábiles”, y significa saber precisamente qué enseñar a cada individuo en cualquier situación dada.
   En otras palabras, es la capacidad de percibir el preciso estado de vida que tiene cada individuo, y la sabiduría de escoger la enseñanza más apropiada para cada persona. Es, también, el poder de la misericordia que busca nutrir a cada individuo, para que pueda manifestar su Budeidad. El origen de todas estas aptitudes y facultades es la profunda e inmensurable sabiduría del Buda. (Seikyo Times, diciembre de 1995, pág. 11)
   El capítulo “Medios hábiles” contiene la revelación más profunda del medio secreto y    todos los seres vivientes son, en sí, budas. En los términos de los Diez Mundos, el mundo de la Budeidad está escondido en la vida de las personas de los nueve mundos. Todos los sufrimientos de los nueve mundos actúan como la fuerza motivadora ideal para nuestra práctica budista para alcanzar la Budeidad. Existe una relación interdependiente tal que la Budeidad no existiría en realidad a menos que existan los nueve mundos.
   El capítulo “Medios hábiles” también contiene los bloques constructores del principio de los “tres mil reinos en un simple momento de vida”.

CAPÍTULO TRES. PARÁBOLAS Y SEMEJANZAS (DLS 10)
   En este capítulo, encontramos la figura de Shariputra danzando de alegría, por haber logrado un avance escuchando el capítulo “Medios hábiles” del cual, dice él, “obtuve algo que nunca antes tuve”. Esta es la comprensión de que alcanzará la Budeidad. Sin embargo, todavía hay importantes discípulos y otros presentes que no comprenden esto. Por esta razón, Shariputra le pide al Buda un mayor esclarecimiento acerca de los tres vehículos que ahora se han convertido en el Vehículo Único. El Buda responde narrando la “Parábola de los tres carros y la casa en llamas”. Un padre retorna y encuentra que sus hijos están jugando en una gran casa que está llena de un gran peligro porque está incendiándose. Los niños están tan absortos en sus juegos que no escuchan sus advertencias. Para atraerlos de estos horrendos apuros, el padre les promete tres carros de bueyes si salen a salvo. Cuando los niños eventualmente salen de la casa en llamas ven que su padre les ha proporcionado un “Gran carruaje tirado por un buey blanco” que aparece descrito en la peculiar combinación de superlativos y detalles que caracteriza al Sutra del Loto
   Esta parábola es una obvia metáfora para el principio del reemplazo de los tres vehículos de Aprendizaje, Realización y Bodhisattva con el Vehículo Único de la Budeidad. Esta parábola en particular es la primera de las siete que aparecen en el Sutra del Loto. Está descrita en prosa y luego reafirmada en verso, la sección más larga de poesía en todo el sutra. Como dice el presidente Ikeda:
   Los seres vivientes, sumergidos en la necedad y la ignorancia, no reconocen que la casa en que habitan está incendiándose. Pero, del mismo modo, tampoco reconocen que su propia vida contiene la vida del Buda. A través de parábolas, el Buda busca hacerles tomar conciencia de la naturaleza espléndida y magnífica que poseen en su interior. (Seikyo Times, julio de 1996, pág. 11)
   Los temas distintivos de las muchas parábolas tales como “La parábola de la ciudad fantasma” o “La parábola de la joya en la túnica” han tocado cuerdas en millones de corazones, haciendo del Sutra del Loto uno de los más diseminados en el mundo. No obstante, las parábolas tienen un significado mayor que el de una simple historia. El presidente Ikeda explica:
   Escuchar las diestras parábolas y analogías del Buda y declarar “¡Sí, entendí!” no constituye una comprensión acabada. La verdadera comprensión, bien profunda, es la que genera una transformación en toda la vida. Por su misma naturaleza, la comprensión, implica transformación. Cuando uno accede a un estado de vida más elevado, nace la sabiduría. Por eso los discípulos que escucharon y comprendieron de verdad las enseñanzas del Buda pudieron emplear parábolas mayores. (Seikyo Times, julio de 1996, págs. 28-29)
El verdadero significado de las parábolas del Sutra del Loto está en que son “idénticas a la Entidad de la Ley”. Las parábolas son comparadas con nuestras experiencias en la práctica del Budismo:
   Lo mismo se aplica a nosotros. Nuestra experiencia individual de haber triunfado sobre los problemas llena de coraje y esperanza a muchas otras personas. En otras palabras, el relato de nuestra victoria personal se convierte en una parábola para expresar el poder de la Ley Mística. Y los que escuchan nuestra experiencia pueden compartirla con los demás.
   El señor Makiguchi inició el movimiento de reuniones de diálogo, centrado en los miembros, para que pudiesen compartir sus experiencias en la fe. Enseñaba la Ley Mística, no mediante teorías difíciles, sino a través de vivencias personales, fáciles de comprender.
   Cada experiencia individual es una parábola de la Ley Mística, que todo lo abarca e impregna. Y la reunión de diálogo, basada en compartir estas vivencias individuales, es una representación contemporánea del capítulo “Parábolas y semejanzas”, una versión moderna de las siete parábolas del Sutra del Loto, un tesoro de parábolas infinitas.
   Las analogías son una esencia fragante, que se elabora destilando misericordia y sabiduría. La Soka Gakkai inició una revolución en la forma de propagar el Budismo, porque adoptó el mismo método que el Sutra del Loto. El espíritu de las parábolas del Sutra del Loto vive en los sesenta y cinco años de historia de la Soka Gakkai. Y seguiremos escribiendo más páginas brillantes, donde quede constancia de la amplia propagación del Sutra del Loto, de Nam-myoho-renge-kyo, día tras día. Porque esta historia será transmitida eternamente a las generaciones del mañana. (Seikyo Times, julio de 1996, pág. 31)

CAPÍTULO CUATRO. CREENCIA Y COMPRENSIÓN (DLS 11)
   Ahora que Shakyamuni ha expuesto “La parábola de la casa en llamas”, aparte de Shariputra, ya son más los que danzan de alegría al saber que ellos también podrán alcanzar la Budeidad. El fruto de la fe es compartido entre los cuatro grandes hombres de saber: Subhuti, Katyayana, Mahakashyapa y Maudgalyayana. Después de abrazar la fe en el Vehículo Único del Buda y de propagar más esta “creencia y comprensión”, los cuatro comunican “La parábola del hombre rico y su hijo pobre”. Esta es la historia del hijo rebelde que es reconocido por su padre y es atraído de vuelta a su casa. El hijo no reconoce a su padre y se contenta con trabajar humildemente limpiando el estiércol de los establos durante veinte años. Finalmente, él desarrolla un respeto por sí mismo a través de consistentes esfuerzos y puede heredar las tierras y propiedades de su padre. Esta es una parábola que muestra la manera en que hemos olvidado nuestras propias raíces de la vida del Buda interior. También muestra cómo el Buda utiliza la misericordia a través de medios hábiles para conducir a quien busca la verdadera identidad que siempre ha poseído. Este capítulo evidencia claramente el principio de que debemos obtener el ingreso al Vehículo Único del Buda mediante la fe.
Lo importante es que en las palabras “creencia y comprensión” se encuentran condensadas las cuestiones fundamentales del Budismo: la fe y la sabiduría, la fe y la liberación (es decir, la iluminación). En un sentido más amplio, esto se relaciona con las cuestiones universales de la civilización y de la filosofía, es decir, la fe y la razón, la creencia y el conocimiento. Es un problema delicado en extremo, muy pertinente para muchas disciplinas, como las ciencias cognitivas y la Psicología. El Budismo, tradicionalmente, ha considerado estas cuestiones con meticulosidad. (Seikyo Times, agosto de 1996, pág. 33)
   Para aquellos de nosotros que practicamos en el Último Día de la Ley, es nuestra propia naturaleza de Buda de Nam-myoho-renge-kyo en lo profundo de nuestra vida.    
   Mediante nuestra experiencia, hemos aprendido que nuestra fe y práctica no nos liberan de las dificultades. Nuestra fe no es una especie de andamio que mantiene unido a un ser humano débil. El presidente Ikeda explica:
   La fe postulada en el Sutra del Loto no brinda respuestas fáciles, no es una vía de escape para esconder la cabeza de las dificultades que presenta la vida humana. De hecho, rechaza las respuestas fáciles y cómodas. En cambio, nos urge a esgrimir estas dos herramientas para explorar la vida –me refiero a la creencia y la comprensión–, nos insta a usarlas para desafiarnos sin cesar y trabajar en pos de nuestro propio perfeccionamiento. Y, al mismo tiempo, nos brinda la energía necesaria para acometer semejante labor. (Seikyo Times, agosto de 1996, pág. 41)

CAPÍTULO CINCO. LA PARÁBOLA DE LAS HIERBAS MEDICINALES (DLS 12)
   Siguiendo a la “Parábola del hombre rico y su hijo pobre”, Shakyamuni alaba a los cuatro grandes hombres de Aprendizaje por su comprensión respecto a la manera en que el Buda emplea los medios hábiles más apropiados para conducir a todos hacia la iluminación. Para aclarar más acerca de la misericordia del Buda hacia todos los seres sensibles y no sensibles, Shakyamuni predica otra maravillosa parábola. Es ésta la que le da nombre al capítulo. La historia comienza con una descripción de gruesas nubes que cubren el mundo y provocando la lluvia en toda la tierra por igual. Todos los árboles, arbustos, pastos y hierbas medicinales reciben la misma cantidad de humedad independientemente de su tamaño. Cada planta, sin consideración de su diversidad, se beneficia por igual de la lluvia. Shakyamuni compara a “El Que Así Llega” que predica el Vehículo Único con la lluvia que hace que esta única Ley Maravillosa sea escuchada por todos de manera que puedan alcanzar la felicidad absoluta.
   Y dentro de una de literatura religiosa tan inmensa como el Sutra del Loto, la parábola de las tres clases de hierbas medicinales y las dos clases de árboles reviste un interés especial. Entre las siete parábolas del Sutra del Loto, subraya como ninguna la diversidad de los seres vivientes. Y, a través de ese énfasis, recalca la igualdad de la misericordia del Buda. (Seikyo Times, setiembre de 1996, pág. 21)
   Desde la perspectiva del Budismo de Nichiren Daishonin, ¿qué podemos aprender acerca de esta parábola que fortalezca nuestra fe y práctica? Ciertamente, podemos usar la historia del sutra para fortalecer la conclusión de que cada uno de nosotros es un ser especial. Asimismo, hemos visto lo que encontrábamos tan lejano, que la función del “medio secreto y místico” del Buda de Nam-myoho-renge-kyo, es conducirnos e nuestra peculiar manera hacia el mismo estado de vida. Además, como Bodhisattvas de la Tierra, en la SGI, debemos extender esta misma oportunidad a todos. Como lo dice el presidente Ikeda en la conclusión del diálogo sobre este capítulo:
   Yo cito y analizo el Gosho con el deseo de transmitirle al mundo entero el humanismo supremo, el estado de vida amplio e inmensurable del Daishonin, quien declaró: “Los diversos sufrimientos de la humanidad son los sufrimientos de una sola persona, Nichiren “ (Gosho Zenshu, pág. 758)
En la parábola del capítulo “Hierbas medicinales”, dice que la gran nube de la misericordia del Buda “cubre” en su totalidad los miles de millones de mundos, es decir, el universo entero. ¿Cómo podemos hacer para que la misericordia y el amor inmensos del Buda original lluevan sobre el mundo entero? Este es el pensamiento que, constantemente, ocupa mi mente; ésta es mi determinación incesante. (Seikyo Times, setiembre de 1996, pág. 31)

CAPÍTULO SEIS. LA ANUNCIACIÓN DE PROFECÍAS (DLS 13)
   Se han narrado varias parábolas y muchos miembros de la audiencia han llegado a reconocer el Único Vehículo del Buda. También han comprendido que el propósito de los medios hábiles empleados por el Buda era permitirles avanzar a lo largo del Camino del Buda. En esta coyuntura, Shakyamuni hace la predicción de la iluminación de uno de los hombres de Aprendizaje más importantes, Mahakashyapa. Se llamará buda Luz Brillante. El sutra alaba en el texto y los versos la belleza y maravilla de lo que será el reino del buda Luz Brillante. Los demás hombres de Aprendizaje, que han llegado a reconocer el error de sus perspectivas, albergan dudas respecto a que ellos también podían alcanzar esta misma meta. Shakyamuni no los mantiene en suspenso por mucho tiempo. Luego, él hace una profecía de que sus discípulos mayores se convertirán en budas y les da los nombres de esos budas. Al final del capítulo, Shakyamuni emite la profecía de que todos los discípulos del mundo de Aprendizaje alcanzarán la Budeidad en el futuro.
   Este es un suceso extraordinario y puede ser comparado con el sol saliendo en medio de la noche. En todos los sutras budistas previos, el objetivo de los mundos de Aprendizaje, Realización e incluso al inicio del camino del bodhisattva realmente no se incluía el objetivo de alcanzar la Budeidad. Quienes habían puesto su fe en los dos vehículos y no habían despertado al Único Vehículo del Buda (tal como está revelado en el Sutra del Loto) no podían ni siquiera emprender la jornada. Dentro del contexto de todas las enseñanzas de Shakyamuni, este sutra no deja de ser revolucionario. Por esta razón, todos los discípulos danzaban de alegría.
   Existen algunas lecciones adicionales que deben ser aprendidas del capítulo “La anunciación de profecías”. Es importante que alentemos a nuestros compañeros seres humanos de manera concreta y efectiva. El presidente Ikeda explica la intención de Shakyamuni cuando hizo las profecías, y cómo podemos interpretarlos en nuestra interacción con los amigos miembros de la SGI:
   La concesión de profecías tiene el efecto de eliminar la intranquilidad que los discípulos habían sentido en lo profundo de su vida y darles una profunda serenidad espiritual. A través de estas profecías que Shakyamuni concede, para asegurarles que manifestarán la Budeidad sin falta, logran tener una tremenda convicción en el futuro. (Seikyo Times, octubre de 1996, pág. 22)
   Originariamente, “anunciación de profecías” significaba dar una clara respuesta, para resolver las dudas que la gente pudiese tener en el corazón. Los líderes siempre deberían hablar de un modo claro y directo. La ambigüedad es perversa, porque provoca inquietud y confusión en los demás. Y dar confianza a la gente es el factor clave en la “anunciación de profecías”. (Seikyo Times, octubre de 1996, págs. 21-22)
   Como se mencionó, la profecía del Buda para los hombres de Aprendizaje, llega con una brillante descripción de la época y la tierra en las que vivirá ese discípulo particular al alcanzar la Budeidad. Las imágenes del reino y época particular de estos budas específicos reflejan el carácter de cada discípulo tal como se manifestará en sus respectivas vidas y tierras de Buda. Resumiendo el significado de esta similitud, el presidente Ikeda dice:
   Lo importante de todo esto es que al manifestar la Budeidad, la personalidad y toda la experiencia vital de estos discípulos pudieron resplandecer de virtuosos atributos iluminados. Mientras tengamos fe, no habrá esfuerzo ni actividad que realicemos en vano. Este es el gran beneficio del Sutra del Loto. (Seikyo Times, octubre de 1996, pág. 25)

CAPÍTULO SIETE. LA PARÁBOLA DE LA CIUDAD FANTASMA (DLS 14)
   Aun cuando quedan algunos discípulos de Aprendizaje y otros que todavía no consiguen el mensaje básico, en el capítulo siete vemos un cambio en la prédica del Buda. Es casi como si estuviese preparando a la audiencia para lo que vendría. Aún así, una vez más él evoca su reafirmación del reemplazo de los tres vehículos por el Único Vehículo del Buda. Lo hace mediante la historia de la “Parábola de la ciudad fantasma”.
Aún antes de la historia, existe la implícita revelación del extenso vínculo kármico compartido con sus discípulos desde sanzen-jintengo (un período de tiempo inmensamente largo). Él utilizó este período de tiempo sumamente largo para exponer el escenario y hablar de un buda llamado Excelencia de la Gran Sabiduría Universal.
Para representar esa inimaginable extensión de tiempo desde que existiera Excelencia de la Gran Sabiduría Universal, Shakyamuni usa la imagen de pulverizar la masa de tres mil mundos en partículas de polvo para ser utilizadas como contadores para jintengo. Estos son los kalpas como granos de arena, a menudo considerados equivalentes a dieciséis millones de años. De esta manera, Shakyamuni pudo hacer que la mente de sus oyentes tratara de captar la inmensa vastedad de la perspectiva del tiempo y el espacio de la vida del Buda.
   Antes de ingresar al camino de la práctica budista, Excelencia de la Gran Sabiduría Universal era un rey mundano con dieciséis hijos. Él abandonó la vida secular para buscar la Budeidad. Le tomó tiempo completar la jornada. Después de su obtención de la iluminación, sus dieciséis hijos, sus familias y millones de reyes celestiales y de los que giran la rueda suplicaron al buda Excelencia de la Gran Sabiduría Universal para que enseñe el Dharma verdadero, el Sutra del Loto. Él privilegia su solicitud y predica el ciclo completo de los sutras. Finalmente, predica el Sutra del Loto a lo largo de ocho kalpas. A continuación, sus dieciséis hijos enseñan y propagan el Sutra del Loto a todos los seres de muchos mundos. Hacen que una cantidad incalculable de estos seres busquen el Camino del Buda. Él establece la conexión de estos seres vivientes interdependientes y se reúne con los discípulos para escuchar el Sutra del Loto con la declaración indeleblemente conmovedora: “Después de que ese buda hubo pasado a la extinción, esas personas que habían escuchado la Ley vivieron aquí y allá, en diversas tierras de buda, y constantemente renacieron en compañía de sus maestros” (The Lotus Sutra, cap. 7, pág. 140). Previamente en la porción del texto, Shakyamuni relata la saga completa del buda Excelencia de la Gran Sabiduría Universal y sus dieciséis hijos todos los cuales habían sido convertidos por su padre, se habían dedicado a la práctica de bodhisattva, y finalmente, habían alcanzado la iluminación perfecta en sus propias y respectivas tierras de buda. Shakyamuni explica que él fue el decimosexto hijo y que esa era la razón por la que estaba allí en el Pico del Águila predicando a las multitudes de seres humanos y no humanos congregadas.
   Shakyamuni repite su declaración de que sus enseñanzas previas de los múltiples vehículos deben ser reemplazados con el Vehículo Único del Buda. A través de la verdadera entidad de la vida revelada en el segundo capítulo, todos los seres son capaces de alcanzar la Budeidad. Y ese Vehículo Único del Buda es el camino correcto hacia la iluminación. Shakyamuni usa la “Parábola de la Ciudad Fantasma” para permitir que sus oyentes capten esta verdad mediante imágenes evocadoras. Es la historia de un grupo de viajeros con su guía, en una dura jornada en el desierto. Los viajeros están buscando una tierra afamada por estar llena de tesoros. Está muy lejos y la jornada es más peligrosa y agotadora de lo que ellos habían imaginado. El grupo está por abandonar la búsqueda. Sintiendo esto y preocupado por el bienestar del grupo, el guía utiliza sus poderes sobrenaturales para crear la ilusión de una opulenta ciudad donde los viajeros pueden descansar y obtener sustento. El descorazonado grupo se regocija al ver esta ciudad. Cuando recuperan su vitalidad, el guía disuelve la ciudad ilusoria. Él explica que están reanudando su viaje hacia la tierra de los tesoros verdadera, que no está lejos.
   Después de narrar la parábola, Shakyamuni explica que el guía es en realidad el Buda. La ciudad fantasma representa A los tres vehículos. Estos son, en realidad, un medio hábil para conducir a las personas hacia su verdadero destino, el Vehículo Único de la Budeidad. Si, desde el comienzo mismo, el Buda hubiese anunciado la verdadera meta, sus seguidores se hubieran resistido a emprender el viaje. De esta manera, la ciudad evocada no es sino un alto en el camino hacia el objetivo real. La ilusión es tan buena que los viajeros, viéndola en la distancia, hacen el firme esfuerzo por llegar a ella y sienten que han logrado algo. Es a través de esas formas que el Buda emplea medios hábiles.
   Desde la perspectiva del Budismo de Nichiren Daishonin, existe la necesidad de redefinir la jornada que se ha emprendido. El potencial para la Budeidad existe en el fondo de nuestra vida. La práctica de la fe en el Gohonzon y el estudio del Budismo son para revelar la Budeidad interior. Entonces, ¿cómo debemos ver el viaje hacia la tierra de los tesoros y la ciudad fantasma? El presidente Ikeda lo explica desde la perspectiva de la Budeidad y los nueve mundos:
   A partir del texto del Sutra del Loto, sabemos que el líder hace desaparecer la ciudad fantasma y que luego avanza hacia la ciudad de los tesoros. Pero Nichiren Daishonin va más allá de dicha interpretación y explica que la ciudad fantasma y la tierra de los tesoros son una entidad inseparable, más que dos entes distintos. (Seikyo Times, diciembre de 1996, pág. 29)
   Si el estado de Buda es el “fin” o el objetivo, los nueve estados son el “proceso” que conduce hasta él. La idea de que sólo llegamos a la Budeidad después de escapar de los nueve estados implica una discontinuidad entre los nueve estados y el estado de Buda –en otras palabras, implica pensar que los nueve estados no contienen la Budeidad y viceversa. Pero, como lo indica el fragmento precedente del “Registro de las enseñanzas transmitidas oralmente”, la idea de que sólo logramos la Budeidad tras erradicar las tres categoría de ilusión (ilusiones del pensamiento y del deseo, ilusiones innumerables como partículas de polvo y arena e ilusiones sobre la verdadera naturaleza de la existencia) pertenece al pensamiento de las enseñanzas provisionales, anteriores al Sutra del Loto.
   La verdadera intención de Shakyamuni al exponer el Sutra del Loto fue esclarecer que los nueve estados contienen el estado de Buda, y que los medios hábiles son, en sí mismos, la verdad. En consecuencia, la ciudad fantasma y la tierra de los tesoros no son entidades separadas o distintas. La ciudad fantasma es “idéntica” a la tierra de los tesoros.
Desde esta perspectiva, en realidad el proceso es el fin. En otras palabras, manifestar la Budeidad no es un destino que aguarda al final del camino de la práctica budista. En cambio, las acciones de la persona que practica y difunde el Budismo son en sí mismas la conducta de un buda. (Seikyo Times, diciembre de 1996, págs. 29-30)

CAPÍTULO OCHO. LA PROFECÍA DE ILUMINACIÓN A LOS QUINIENTOS DISCÍPULOS (DLS 15)
   Una gran excitación se generó ante la explicación de Shakyamuni respecto a su conexión con pasadas existencias y con los discípulos presentes en la prédica del Sutra del Loto en el Pico del Águila. De la categoría de las personas que “escuchan la voz”, (personas del estado de Aprendizaje) los principales discípulos Purna, Ananda, Rahula y otros perciben la verdadera intención del Buda y el significado del Vehículo Único de la Budeidad. Purna era conocido por su gran elocuencia, al convertirse en el líder en la prédica de la Ley. Él se acerca, hace una reverencia y se dirige a Shakyamuni:
   El Honrado por el Mundo es extraordinario, muy especial, ¡y sus acciones raras veces se enfrentan! Adaptándose a las diversas naturalezas de las personas de este mundo y empleando medios hábiles e introspección, él les predica la Ley, alejando a los seres vivientes de su avaricia y apego a esto o aquello. Los beneficios del Buda son tales que no podemos expresarlos en palabras. Sólo el Buda, el Honrado por el Mundo, es capaz de conocer el deseo que hemos tenido en lo profundo de nuestro corazón desde el comienzo. (The Lotus Sutra, 144)
   Escuchando el discurso de Purna, el Buda alaba sus tenaces esfuerzos para predicar la Ley y nunca atraer la atención hacia sí mismo. Él hace la predicción de que Purna, finalmente, se convertirá en un buda llamado El Que Así Llega Ley Brillante. Shakyamuni describió las magníficas tierras de buda que su vida pondría de manifiesto. Además, había quinientos arhats que también recibieron una profecía de iluminación.
   La promesa de iluminación para los que escuchan la voz en el capítulo “La profecía de iluminación a los quinientos discípulos” es muy significativa. Cuando ellos comprenden la rectitud de la enseñanza del Vehículo Único de la Budeidad, despiertan su misericordia para compartir esta enseñanza y su felicidad con muchas otras personas. Hablando acerca de la intención de Shakyamuni al predicar el Sutra del Loto, el presidente Ikeda comenta:
   Pero la verdadera intención del Buda no está contenida en el Hinayana. El Buda no quería que sus discípulos terminaran siendo personas centradas en ser salvadas, de modo que expuso el Sutra del Loto, que deja en claro su auténtico propósito.
Lo que deberían buscar, les dice a los que escuchaban la voz, no es la iluminación del Hinayana, sino la sabiduría de Buda. Es como si les manifestara: “Quiero hacer que todas las personas ingresen en la sabiduría de Buda y eleven su estado de vida, para poder guiar libremente a otros hacia la felicidad, tal como lo hace el Buda”. Esta es su verdadera intención. (Living Buddhism, enero de 1997, págs. 40-41)
   Fue por esta razón que Shakyamuni alabó a Purna. Basados en el texto, es  evidente que las demás personas que escuchaban la voz –que eran discípulos directos de Shakyamuni– pudieron aprender del ejemplo de Purna y de la misericordia de su mentor, que ellos podían alcanzar la misma transformación interior. Para demostrar su comprensión de lo que habían obtenido, ellos narran la parábola de la joya en la túnica.  
   La historia trata de un hombre pobre que visita a un viejo amigo. Le invitan comida y bebida. Embriagado por el vino, se queda dormido. Teniendo que salir para cumplir un recado, su anfitrión se preocupa por la condición de su indigente amigo. De modo que cose una joya invalorable en el abrigo del mendigo. Al despertar y encontrar a su amigo el hombre pobre abandona la casa. Ignorando acerca de la valiosa joya cosida en su harapiento manto, él deambula de tierra en tierra manteniéndose en terribles circunstancias. Un día, el hombre pobre se encuentra nuevamente con su viejo amigo.  
   El amigo se conmociona al ver que el hombre pobre no había utilizado la valiosa joya que él mismo cosiera en el manto de su amigo tantos años atrás. Corta el manto y revela la brillante joya en su interior. El amigo, que había tenido una pesada vida, se regocija al saber que está en posesión de ese tesoro.
   La naturaleza de la joya inapreciable es que decidamos buscar una sabiduría integrada, que deseemos alcanzar la Budeidad. Los participantes en el diálogo sobre el sutra se refieren a la comprensión de los que escuchaban la voz del capítulo de “La ciudad fantasma” que ellos habían estado conectados con Shakyamuni desde el remoto pasado de sanzen jintengo. Esto pone de manifiesto otro significado de la joya como el inapreciable tesoro que el Buda, como un “buen amigo” del hombre pobre, había implantado en su vida hace tanto tiempo. Como dice el presidente Ikeda:
   Regresan a su “verdadera identidad”. Esto es el “despertar de los que escuchan la voz”. Despiertan del “sopor ebrio de la oscuridad” (es decir, de la ignorancia sobre la verdadera naturaleza de su vida).
   Aquí, la palabra clave es “recordar”. Volver al punto primordial de partida. Percibir que la Ley es el manantial del que brota su propia existencia. Es cuestión de “regresar al yo verdadero”. La embriaguez de la “oscuridad” había hecho que lo olvidaran. (Living Buddhism, enero de 1997, pág. 47)

CAPÍTULO NUEVE. PROFECÍAS A ADEPTOS Y APRENDICES (DLS 15)
   Hay dos discípulos directos de Shakyamuni que quedan y que todavía no han recibido una profecía de iluminación. Ellos son su primo, Ananda, y su hijo, Rahula.   
   Ambos se acercan al Buda para preguntarle acerca de lo que les deparará el futuro. Shakyamuni no se tarda. Primero, confiere una profecía de la futura Budeidad a Ananda, quien abandonó su vida en la realeza para seguir a Shakyamuni y convertirse en su asistente personal. Debido a que siempre estuvo con el Buda, se hizo conocido como el primero en “escuchar las enseñanzas del Buda”. “Esto es lo que yo escuché”, frase que aparece al comienzo del Sutra del Loto, son palabras suyas. Shakyamuni dice que se convertirá en El Que Así Llega Rey del Poder Irrestricto de la Sabiduría del Mar y la Montaña. 
   Rahula, su hijo, siempre estaba buscando y aprendiendo de los discípulos mayores de Shakyamuni. Él nunca trató de aprovecharse de su relación como hijo de Shakyamuni. Su reputación llegó a ser la de “el primero en la observancia inconspicua de los preceptos”. Shakyamuni dice que él se convertirá en El Que Así Llega Posado Sobre Siete Flores Cual Tesoros.
   Junto con las promesas de iluminación para Ananda y Rahula, llegaron profecías similares para otros dos mil que escuchaban la voz, que abarcaban desde arhats hasta aquellos que apenas comenzaban a aprender las enseñanzas budistas. El presidente Ikeda explica que esta predicción implica la inclusión de todas las personas:
   Como ya dije antes, el espíritu de conceder profecías a los que escuchan la voz es el de conferir predicciones a todas las personas. La promesa de la iluminación no se aplica sólo a los que escuchan la voz; todas las personas pueden manifestar el estado de Buda. Todos pueden heredar la sabiduría de Buda y ser capaces de guiar a los demás a la felicidad. Esta idea queda expresa en la profecía de iluminación destinada a todos los discípulos de esta categoría, sin distinción entre arhats, adeptos y aprendices.

CAPÍTULO DIEZ. MAESTRO DE LA LEY (DLS 16)
   Con este capítulo, el sutra avanza más allá de los eventos y las parábolas de los nueve capítulos anteriores que tenían como objetivo revolucionar completamente la mente de los discípulos de Aprendizaje y Realización. Ahora estos discípulos están en la congregación como bodhisattvas. Otros ochenta mil bodhisattvas llegan desde lejanos rincones del universo para escuchar el Sutra del Loto. El capítulo comienza con la documentación que hace Shakyamuni del beneficio a ser recibido por cualquier hombre o mujer que apoye y enseñe el Sutra del Loto después de su muerte.
   Incluyendo a las multitudes reunidas, Shakyamuni se dirige al bodhisattva Rey de la Medicina con varias afirmaciones críticas que reflejan el elevado estatus del Loto en sus enseñanzas.
   Los sutras que prediqué suman incontables miles, decenas de miles y millones. Entre todos los que he predicado, predico y predicaré, este Sutra del Loto es el más difícil de creer y el más difícil de comprender. Rey de la Medicina, este sutra es el almacén de la esencia secreta de los budas. (The Lotus Sutra, cap. 10, pág. 164)
   Shakyamuni también enfoca el inestimable valor y la dificultad de enseñar y propagar el Sutra del Loto en el futuro. Él explica que aquellos que emprenden esta gran tarea serán personas puras y de corazones altruistas que impedirán las grandes recompensas de sus actos virtuosos para continuar su ayuda para que las personas alcancen el Camino del Buda.
   Si alguien, hombre o mujer, secretamente enseña a una persona inclusive una sola frase del Sutra del Loto, sabed que se trata de un emisario del Buda, enviado para desempeñar la tarea del Buda. (The Lotus Sutra, cap. 10, pág. 162)
   No debe ser distribuido o transmitido imprudentemente a los demás. Ha sido guardado por los budas, los Honrados por el Mundo, y desde tiempos antiguos hasta ahora nunca ha sido expuesto abiertamente. Y ya que el odio y los celos hacia este sutra abundan aun cuando El Que Así Llega se encuentra en el mundo, ¿cuánto peor será una vez que él haya muerto? (The Lotus Sutra, cap. 10, pág. 164) 
   Los participantes en el diálogo sobre el sutra concuerdan en que el capítulo “Maestro de la Ley” está orientado hacia la propagación en el futuro. Conforme avanzamos, el flujo completo del sutra se convierte en un poderoso río de orientación y aliento respecto a cómo practicar, propagar y estudiar la verdadera realidad del Budismo en las épocas venideras. El diálogo señala que este capítulo es una respuesta a la pregunta que fue planteada al comienzo del diálogo y que concernía a “una época carente de filosofía”.
   El presidente Ikeda dice que el capítulo “Maestro de la Ley” pinta el retrato de la clase de personas que aparecerán en la “era de la oscuridad”. Hay un impulso dual en el capítulo “Maestro de la Ley”. Dice que una persona que acepta a la Ley como su maestro se convierte en “un buscador del camino” así como en el maestro que propaga la Ley”.
   El presidente Ikeda comenta:
   Los maestros de la Ley reúnen ambas cualidades dentro de sí. Olvidar la “búsqueda” es arrogancia; olvidar la “salvación de los demás” es egocentrismo. Mientras siguen profundizando su propia comprensión, los maestros de la Ley guían a otras personas a la felicidad; al ayudar a los demás a ser dichosos, ellos adquieren una comprensión más profunda. Buscar la Ley es, en sí, guiar a los demás hacia la iluminación. Guiar a otras personas a la Budeidad es, en sí, buscar la Ley. Aquí yace el supremo camino de la vida. (Living Buddhism, febrero de 1997, págs. 24-25)
   La parte concluyente del capítulo trata en mayor detalle la propagación de la Ley después de la muerte del Buda.

CAPÍTULO ONCE. EL SURGIMIENTO DE LA TORRE DE LOS TESOROS (DLS 17/18)
   Las descripciones de este capítulo no economizan para nada el uso de los superlativos. ¿De qué otra manera podría representarse el evento de una torre tachonada de joyas y del tamaño del mundo que emerge de la tierra? A través de la manifestación de la Torre de los Tesoros y la voz de El Que Así Llega Muchos Tesoros hablando desde el interior y la elevación de toda la congregación, la escena se traslada dramáticamente de los rocosos riscos del Pico del Águila a un escenario en otra dimensión conocido como la “Ceremonia en el aire”.
   Al surgir de la tierra la masiva estructura, una fuerte voz habla desde el interior de la torre:
   “¡Es excelente, excelente, Shakyamuni, Honrado por el Mundo, que puedas tomar la gran sabiduría de la igualdad, una Ley para instruir a los bodhisattvas, guardada y tenida en mente por los budas, el Sutra del Loto de la Ley prodigiosa y predicarlo en bien de la gran asamblea! Es como dices, tal como tú dices. ¡Shakyamuni, Honrado por el Mundo, todo lo que has expuesto es la verdad! (The Lotus Sutra, cap. 11, pág. 171)
   Siendo la visión verdaderamente imponente, creó preguntas y dudas en la mente de muchos en la asamblea. Como consecuencia, un bodhisattva llamado Gran Alegría de Prédica preguntó a Shakyamuni acerca  del significado de la irrupción de la torre y la voz que proviene del interior. Él responde que la torre es en realidad el “cuerpo completo de El Que Así Llega” (The Lotus Sutra, cap.11, pág. 171). Habla de la existencia de El Que Así Llega Muchos Tesoros, quien ha viajado desde el remoto lugar en el universo, como dijo que haría, para verificar la verdad del Sutra del Loto siempre que fuese predicado.
   Seguidamente, Shakyamuni realiza la hazaña sin paralelo de iluminar incontables tierras de buda en todas direcciones, revelando una incalculable cantidad de budas, cada uno de ellos con su propio séquito de grandes bodhisattvas que están viajando para participar en la ceremonia. Una vez que todos están presentes, Shakyamuni se levanta de su asiento y abre la Torre de los Tesoros.
   El buda Muchos Tesoros declara nuevamente la veracidad de la enseñanza de Shakyamuni y le pide que se siente en la cima cerca de él. Para que todos puedan participar,  Shakyamuni eleva a toda la asamblea a la misma altura de la Torre de los Tesoros.
   Ha habido muchos esfuerzos para interpretar este evento. La gran torre es vista por muchos estudiosos budistas como una imagen que representa la iluminación de Shakyamuni. La Ceremonia en el Aire descrita en el capítulo “El surgimiento de la Torre de los Tesoros” también es una expresión de la misericordia del Buda  para esforzarse al máximo para comunicar el estado de la iluminación a todos los seres sensibles. Como dice el presidente Ikeda, tenemos que ver este mismo estado de vida también dentro de nosotros mismos:
   El señor Toda nos enseñó claramente qué es la Torre de los Tesoros  y qué significa su aparición. Esa torre colosal es expresión del estado de buda que yace en cada uno de nosotros, en forma latente. Nos enseña la infinita nobleza de la vida.
En verdad, acaso no haya manera más apropiada de expresar el estado eterno e ilimitado de la Budeidad que recurrir a la metáfora de la Ceremonia en el Aire, un escenario libre de todas las limitaciones del tiempo y el espacio. (Seikyo Times, noviembre de 1995, págs. 6-7)
   Una vez que todo está en su lugar, Shakyamuni exhorta a la asamblea con la pregunta respecto a quién propagará el Sutra del Loto después de su muerte. Le pide a todos los presentes que hagan un gran juramento para la propagación. Para mostrar la dificultad de llevar a cabo esta misión, él establece los “seis actos difíciles y los nueve actos fáciles”. Es un desproporcionado contraste de nueve de las hazañas más increíbles como el de tomar el monte Sumeru y arrojarlo hasta las innumerables tierras del Buda, con la dificultad de tener fe en el Sutra del Loto y enseñarlo.
   ¿Nos asombramos con esta tremenda entidad flotando en el espacio, rodeada de innumerables huestes de seres celestiales, humanos y no humanos? ¿Cómo puede incorporarse esta imagen como parte funcional de nuestra vida como practicantes del Budismo de Nichiren Daishonin? Discutiendo el primer capítulo, el presidente Ikeda le pide a los participantes en el diálogo que expliquen el principio de las “Tres asambleas en los dos lugares”. Los participantes examinan primero el flujo del Sutra del Loto capítulo por capítulo. La porción que comienza con el capítulo “Introducción” (primero) y termina con el capítulo “Maestro de la Ley” (décimo) tiene lugar en el Pico del Águila.   
   Con el inicio del capítulo “El surgimiento de la Torre de los Tesoros” (undécimo), de pronto surge este enorme edificio irrumpiendo de la tierra y se queda suspendido en el aire al igual que toda la asamblea. Esta Ceremonia en el Aire continúa hasta el capítulo “La transferencia” (vigésimo segundo). Desde el capítulo “Asuntos pasados del bodhisattva Rey de la Medicina” (vigésimo tercero), la escena retorna al Pico del Águila y permanece allí hasta el último capítulo. Esta es la fuente de su designación como las “Tres asambleas en los dos lugares”. Mientras que el Pico del Águila es un lugar real donde Shakyamuni predicó sus enseñanzas, la Ceremonia en el Aire trasciende la realidad ordinaria. El presidente Ikeda continúa con su propia perspectiva:
   El hecho de que la asamblea se desplace del Pico del Águila a la Ceremonia en el Aire y luego, de la Ceremonia en el Aire al Pico del Águila otra vez, traza un paralelismo con el movimiento de la realidad al estado de iluminación, y de éste nuevamente a la realidad. O, para ser más exactos, se va de la realidad previa a la iluminación al estado de Buda. Y del estado de Buda, a la realidad posterior a la iluminación. (Seikyo Times, noviembre de 1995, pág. 7)
   “Quedar suspendidos en el aire” significa elevar nuestro estado de vida a través de nuestra fe decidida e inamovible. Éste es el significado que corresponde al desarrollo del sutra desde la primera asamblea sobre el Pico del Águila hacia la Ceremonia en el Aire. (Seikyo Times, noviembre de 1995, pág. 8)
   De la vida real a la Ceremonia en el Aire, y de la Ceremonia en el Aire a la vida real... En este continuo proceso de ida y vuelta yace el camino de la revolución humana el camino por el cual nuestro estado de vida se transforma y deja de hallar motivación en un “sentido pequeño del yo” para encontrar inspiración en la “identidad verdadera”, en el “yo superior”. No debemos permitir que nuestra vida quede totalmente capturada por la realidad inmediata. Tenemos ideales y debemos concretarlos, para trascender la realidad actual. Por otro lado, tampoco debemos alienarnos totalmente de la realidad. No podremos transformar nada a menos que tengamos los pies bien plantados en la tierra. (Seikyo Times, noviembre de 1995, págs. 8-9)
   Lo importante es que nosotros estamos poniendo en acción “las tres asambleas en los dos lugares” en nuestra vida cotidiana. Nichiren Daishonin se valió de la Ceremonia en el Aire para expresar su propia iluminación, en la forma física del Gohonzon.  
   Nosotros, los que abrazamos la fe en ese Gohonzon, estamos manifestando el dinamismo del Sutra del Loto directamente en nuestra propia vida. (Seikyo Times, noviembre de 1995, pág. 13)
   Cuando nos consagramos a la propagación de la Ley Mística, el momento actual siempre es inseparable de la eternidad. La eternidad y el momento presente se conjugan, interactúan y reverberan en unión armoniosa dentro de nuestra propia vida diaria. Nuestra vida es un continuo fluir de alegría, una manifestación de eternidad en el momento actual. Por eso, para la persona de fe, un instante no es sólo un momento; un día es mucho más que un día. Cada momento, cada día encierran una eternidad de valor concentrado. Cuando más pase el tiempo, más resplandecerá de luz dorada cada instante y cada día de nuestra vida. (Seikyo Times, noviembre de 1995, pág. 13)

CAPÍTULO DOCE. DEVADATTA (DLS 19/20)
   El capítulo “Devadatta” contiene algunas lecciones muy importantes respecto al poder del Sutra del Loto para posibilitar la iluminación de toda forma de vida, así como a una persona de gran maldad. Al comenzar el capítulo, Shakyamuni relata la historia de un rey, en el pasado distante, que deseaba encontrar la verdad del Budismo. Él encontró a un ermitaño que, según se decía, poseía la enseñanza del Sutra del Loto. En retribución por el servicio del rey, el ermitaño la compartiría con él. Por mil años el rey sirvió al ermitaño. Shakyamuni dice:
   El Buda dijo a los monjes: “En ese momento, el rey era yo mismo, y el vidente era el hombre que ahora es Devadatta. Totalmente debido a que Devadatta era un buen amigo mío, pude llegar a estar plenamente dotado de las seis paramitas, con compasión, misericordia, alegría e indiferencia, con los treinta y dos rasgos, las ochenta características, el color dorado purpúreo, los diez poderes, las cuatro clases de audacias, los cuatro métodos para ganarse a la gente, las dieciocho propiedades no compartidas, y las propiedades trascendentales y el poder del camino. El hecho de que haya alcanzado la iluminación imparcial y correcta y pueda salvar a los seres vivientes en una amplia escala se debe totalmente a Devadatta, quien era un buen amigo”. (The Lotus Sutra, pág. 184)
   Por supuesto, esta no era la imagen de Devadatta en los sutras preliminares. Él era el primo celoso de Shakyamuni que se convirtió en enemigo del Buda, intentando arrebatarle su vida y perturbar la Orden Budista. Sin embargo, los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” parecen profundizar en la naturaleza del bien y el mal como lo demuestran Shakyamuni y Devadatta. Con toda certeza, Shakyamuni le señaló a Devadatta que la maldad no puede ser transformada si no es desafiada:
   Si el mal obra para que se revele el bien, entonces el mal en su totalidad pasa a ser el bien. Esta es, realmente, la inseparabilidad entre el bien y el mal. Pero si dejamos que el mal cunda por doquier, entonces no termina convirtiéndose en bien. Sólo cuando uno desafía y vence rotundamente al mal, pasa a ser entidad de la inseparabilidad entre el bien y el mal.
   En tal sentido, la iluminación de las personas malvadas, expuesta en el capítulo “Devadatta”, es gran prueba de la victoria obtenida por Shakyamuni. Es su “declaración de victoria”. Shakyamuni sólo puede decir que Devadatta había sido su mentor y buen amigo en una existencia pasada y que lo había ayudado en su misión, cuando se erige como vencedor desde su estado elevado de vida. (Living Buddhism, junio de 1997, pág. 31)
   La siguiente revelación es aquella en que la hija del Rey Dragón demuestra la capacidad para alcanzar rápidamente la iluminación suprema. El bodhisattva Majushri retorna del palacio del Rey Dragón donde explica que tiene la prueba real de alguien que ha podido involucrarse en una práctica que conduce rápidamente al más elevado estado de vida. Surge la duda de parte de los presentes, debido a que a ellos se les había enseñado que Shakyamuni alcanzó la Budeidad sólo después inmensurables kalpas de arduas prácticas. Manjushri presenta a la hija del dragón. Su ofrecimiento de una joya inapreciable a Shakyamuni como muestra de su profundo aprecio, y su subsecuente capacidad para alcanzar rápidamente la iluminación perfecta se gana el corazón de todos los presentes. Mediante la prueba real ella derrumba los prejuicios de sus mentes respecto al acceso de todos los seres a la iluminación. Ellos renuevan su esperanza en que la Budeidad no es algo alejado en la distancia, sino que está a su alcance en este preciso momento.
   Los participantes en el diálogo sobre el sutra señalan que el quinto volumen del Sutra del Loto, que contiene el capítulo “Devadatta”, fue especialmente popular en el Japón cuando el Sutra del Loto fue llevado por primera vez desde la China. El presidente Ikeda comparte la visión de Nichiren Daishonin sobre su importancia:
Con respecto a este volumen del Sutra del Loto, Nichiren Daishonin dice: “El quinto volumen contiene la esencia y la médula de todo el sutra, la doctrina de que cada uno manifiesta la Budeidad con la forma que posee”. Desde luego, hay muchos otros capítulos importantes, pero el Daishonin dice que este volumen representa “la esencia y la médula de todo el sutra”, con lo cual sugiere que el capítulo “Devadatta” es la clave para el principio de manifestar la Budeidad con nuestra forma actual.
   El espíritu del Sutra del Loto consiste en permitir que todas las personas lleguen a ser budas. Para la gente hay algo que es más importante que la doctrina en sí, y es el hecho de poder manifestar o no la Budeidad. Y el capítulo “Devadatta”, por cierto, brinda una respuesta clara y directa a dicha cuestión. (Living Buddhism, junio de 1997, pág. 24)
   De modo que, mediante estos ejemplos [de Devadatta y la niña dragona], las personas podían aceptar la posibilidad de la iluminación no como una teoría, sino como un hecho real. (Living Buddhism, junio de 1997, pág. 25)

CAPÍTULO TRECE. EL ALIENTO A LA DEVOCIÓN (DLS 21)
   Este capítulo contiene la estricta advertencia de Shakyamuni a todos los asistentes a la Ceremonia en el Aire para defender el Sutra del Loto incluso en tiempos de gran oposición. Todos los monjes, monjas, arhats, y bodhisattvas respondieron con muchas promesas y juramentos diciendo: “Rogamos al Honrado por el Mundo que no tenga más aflicciones, Cuando el Buda haya entrado en la extinción, nosotros abrazaremos, leeremos, recitaremos y predicaremos este sutra”. (The Lotus Sutra, cap. 13, pág. 190)
   El fervor por encargarse de la propagación alcanza su punto máximo cuando la congregación entera emite un magnífico rugido de león de compromiso por abrazar y propagar el Sutra del Loto en los malvados tiempos venideros, cuando la gente haya perdido su espíritu de búsqueda por la verdad y el Camino del Buda. Ellos recitan una letanía del tipo de oposición a los demonios e incluso de las peores persecuciones que afrontarán al emprender este amedrentador objetivo. En la sección en verso aparece la famosa declaración “Para predicar este sutra resistiremos estas dificultades. No nos importan el cuerpo o la vida. Sólo nos preocupa el Camino supremo” (The Lotus Sutra, cap. 13, págs. 194-195)
   En el diálogo sobre el sutra, los participantes se involucran en una amplia discusión sobre los “Tres enemigos poderosos”. La manera en que funcionan en la sociedad por su propio poder y ganan disminuyendo la vitalidad de la gente, creando confusión en el mundo de la espiritualidad humana. Por esta razón, es esencial tener un firme compromiso con la práctica budista y un vínculo con el maestro correcto. Entonces, la frase “Camino supremo” del capítulo “El aliento a al devoción” se convierte en algo inseparable de la vida diaria. El presidente Ikeda explica:
   Nichiren Daishonin dice: “El camino insuperable es Nam-myoho-renge-kyo. Hoy, yo, Nichiren, y mis discípulos estamos más preocupados por Nam-myoho-renge-kyo que por nuestra vida” (Gosho Zenshu, pág. 749). El significado supremo de la fe consiste en atesorar Nam-myoho-renge-kyo más que la propia vida. Es consagrarnos íntegramente a lograr la amplia propagación de la Ley Mística.
   En concreto, esto significa avanzar junto a la SGI, proteger la organización seriamente y practicar dentro de ella, tanto en tiempos de alegría como  en momentos de adversidad. Fuera de la SGI, no existe el kosen-rufu de la Ley Mística. Este es el significado de lo que expresó Josei Toda, segundo presidente de la organización: “La Soka Gakkai es más valiosa que mi propia vida” (Living Buddhism, agosto de 1997, pág. 42)

CAPÍTULO CATORCE. PRÁCTICAS PACÍFICAS (DLS 22)
   El capítulo “Prácticas pacíficas” concluye la primera mitad de los veintiocho capítulos del Sutra del Loto, conocida como la enseñanza teórica. Independientemente de la denominación, el drama continúa para resaltar la necesidad esencial de practicar y propagar este sutra con una fe incansable y acciones concretas.
   En discusiones con Majushri, el Buda establece la conducta y actividades de quienes emprenderán la propagación del Sutra del Loto. El aliento de Shakyamuni es general y enfatiza el respeto por la dignidad de la vida, la acción altruista basada en la misericordia y la sabiduría.
   Los participantes en el diálogo sobre el sutra discuten el concepto de las “prácticas pacíficas” con la disposición mental del shakubuku –una forma directa de propagación. Traen a colación la advertencia de Nichiren Daishonin respecto a que el shakubuku, y no el shoju, es el método apropiado para una época en que el espíritu correcto del Budismo ha sido distorsionado o perdido. No obstante, el presidente Ikeda afirma que incluso dentro de un contexto de firme refutación de las enseñanzas erróneas, tenemos que emplear el medio que sea más efectivo en la sociedad:
   Desde nuestro punto de vista, esto significa que aun cuando estemos difundiendo la Ley “sin que nos importen el cuerpo y la vida”, no debemos hacer nada que refleje una mala imagen de la Ley. Ya que nuestra principal preocupación es la Ley, necesitamos hacer gala de nuestra máxima sabiduría para poder propagarla. Este es el corazón del capítulo “Prácticas pacíficas”. Explica la postura del que se pregunta “¿Cómo puedo hacer para ayudar a que todas las personas reciban el beneficio de la Ley Mística?”. Por ende, el capítulo “Prácticas pacíficas” se expresa plenamente en nuestro afán de orar por la felicidad de los amigos y de emplear la sabiduría para dialogar con los demás sobre el Budismo.
   Cuando Nichiren Daishonin enseñaba a sus seguidores el espíritu de shakubuku de “no escatimar la vida”, también recalcaba la importancia de mostrar a las personas genuina cortesía y respeto, y de conducirse con sabiduría. (Living Buddhism, setiembre de 1997, Pág. 34)
   El capítulo concluye con la “Parábola de la joya en el rodete”. Es la historia de un gran rey que había salido victorioso sobre otros reyes en otros reinos. A quienes lo apoyaban en estas batallas él les brindaba maravillosos regalos. Como lo hacen otros reyes, él usa una joya preciosa en el rodete sobre su cabeza como señal de su estatus real. Deshacerse de ella sería como rebajar su estatus. Finalmente, sin embargo, él se quita su propia joya y se la concede a aquellos que se han distinguido. El Buda explica a Manjushri que el Buda protege su enseñanza más elevada y más eficaz, el Sutra del Loto, concediéndola a sus discípulos al final, así como el rey había protegido la joya en su rodete para sus guerreros más valientes.

CAPÍTULO QUINCE. "IRRUMPIR DE LA TIERRA” (DLS 23/25)
La segunda mitad del Sutra del Loto comprende lo que se conoce como la “enseñanza esencial”. Con el capítulo quince, el drama del sutra se intensifica. Shakyamuni sacude a la asamblea con la revelación de su verdadera identidad. En la enseñanza teórica de la primera mitad del sutra, él no se refirió a sí mismo cuando compartía las historias y parábolas de otros budas y sus tierras. Él fue lo suficientemente cuidadoso como para discutir sólo su pasado principesco o sus prácticas ascéticas o de bodhisattva. La irrupción desde el fondo de la tierra de una multitud de bodhisattvas maravillosamente adornados, “más numerosos que las arenas de sesenta mil ríos Ganges” cambió eso.   
   Cuando se le pregunta quién había entrenado a esos maravillosos modelos de la práctica budista, revela que él mismo había cuidado de ellos durante toda la extensión de su desarrollo.
   En el capítulo decimosexto, “Duración de la vida”, Shakyamuni describe, para asombro de su audiencia, que desde el pasado inconcebiblemente remoto, él ha estado apareciendo en el mundo saha1 como un Buda, enseñando y convirtiendo a los seres vivientes. Esta importante revelación expande su identidad, del Shakyamuni venerado como el maestro del Camino budista en la India antigua, a la manifestación del Buda eterno en el universo, abriendo así el camino para que las personas transformen su vida y hagan emerger su propia naturaleza de Buda tal como son.
   En los términos de los acontecimientos del capítulo quince, la declaración de Shakyamuni de que él mismo había entrenado a estos bodhisattvas dio al traste con la percepción de la asamblea, en lo que respecta al camino hacia la iluminación budista.   
   Sí, había otros budas congregados, sentados en sus tronos de leones, pero la mayoría de los seres presentes estaban contentos con aceptar la profecía de una futura iluminación. Como veremos, el descubrimiento de Shakyamuni de su yo real creó una crisis en la asamblea respecto a su propia comprensión de las enseñanzas. De un tirón les habían quitado la base sobre la cual ellos, anteriormente, se habían sentido tan seguros.
   Para establecer el contexto de la historia, revisemos los puntos saltantes de los cuatro capítulos finales de la enseñanza teórica, o la primera mitad del sutra. El capítulo undécimo presenta la irrupción de la maravillosa Torre de los Tesoros junto con la llegada de otros budas con sus séquitos desde sus respectivas tierras de Buda.  
   Junto con los budas hay una muy diversa selección de toda clase de seres provenientes de todo el universo. En honor a la ocasión, Shakyamuni purifica los vastos reinos de todas las direcciones, convirtiéndolos en tierras de budas, y también los “conecta“ con los sucesos de la torre flotante a través de una especie de “transmisión simultánea” mística.
   Este ejercicio expande la audiencia a unas proporciones incalculables. En medio de este escenario universal, Shakyamuni toma su lugar en la maravillosa Torre de los Tesoros. El buda Muchos Tesoros ya está sentado y da fe de la veracidad de las declaraciones de Shakyamuni mientras describe la manera en que el Sutra del Loto debe ser propagado después de la muerte del Buda. El capítulo doce muestra las hazañas del malvado Devadatta, pero termina con una profecía de su iluminación. Esto muestra que la práctica de la Ley, tal como está revelada en el sutra, posibilita la superación de cualquier clase de pasado perverso. Los capítulos trece “El aliento a la devoción”, y catorce, “Prácticas pacíficas”, presentan las muchas promesas de la asamblea para propagar y enseñar el Sutra del Loto. Shakyamuni muestra su gratitud por las promesas de estos bodhisattvas.
   Al inicio del capítulo “Irrumpir de la tierra”, es el turno para que los bodhisattvas y mahasattvas (2), que son más numerosos que las arenas de muchos ríos Ganges, y que se han reunido para escuchar el Sutra del Loto, hagan su promesa para propagarlo. Sin embargo, algo ha cambiado en la disposición del Buda para aceptar su determinación. En un cambio aparentemente radical, Shakyamuni responde enfáticamente:
   ¡Desistid, hombres de fe devota!. No hay necesidad de que protejáis este sutra. ¿Por qué? Porque en este mundo saha en que estoy, hay bodhisattvas y mahasattvas que son tan numerosos como las arenas de sesenta mil ríos Ganges, y cada uno de estos bodhisattvas tiene un séquito igual a las arenas de sesenta mil ríos Ganges. Después de que haya entrado en la extinción, estas personas podrán proteger, leer, recitar y predicar ampliamente este sutra. (The Lotus Sutra, cap. 15, págs. 212-213)
   En ese momento la tierra se estremeció y se abrió de cuajo. Del espacio vacío que yace por debajo brotan multitudes de bodhisattvas abrumadoramente radiantes.   
   Emanando luz y afabilidad, estos “bodhisattvas que parecían budas” causan una significativa conmoción en la asamblea. Como una expresión natural de su carácter digno, estos bodhisattvas avanzaron hacia la magnífica Torre de los Tesoros para ofrecer su saludo y preguntar por el bienestar de El Que Así Llega, Shakyamuni, así como del buda Muchos Tesoros. Rotan para hacer su reverencia a toda la asamblea: a los budas en los tronos de león con sus asistentes, a Maitreya y otros bodhisattvas, a los que escuchan la voz y los discípulos de los dos vehículos, a los reyes dragones, a los humanos y a los demás seres.
   Los cuatro líderes de los bodhisattvas se dirigen al buda Shakyamuni quien está sentado en la cima de la Torre de los Tesoros. Esta escena, con su preocupado discurso, se ha convertido en un verdadero ejemplo de conducta que se adecua a la relación maestro y discípulo.
   Entre estos bodhisattvas había cuatro líderes. El primero se llamaba Prácticas Superiores, el segundo, Prácticas Ilimitadas, el tercero, Prácticas Puras, y el cuarto, Prácticas Firmemente Establecidas. Estos cuatro bodhisattvas eran los principales líderes y maestros guías de todo el grupo. En presencia de la gran asamblea, cada uno de ellos une las palmas de sus manos, miran al buda Shakyamuni, y preguntan:   
   “Honrado por el Mundo, ¿son pocas tus dolencias, son pocas tus preocupaciones, está tu práctica avanzando fluidamente? ¿Las personas a quienes te propones salvar reciben la enseñanza fácilmente? ¿El esfuerzo no hace que el Honrado por el Mundo se sienta extenuado?” (The Lotus Sutra, cap. 15, pág. 214)
   Shakyamuni les responde, “El Que Así Llega está bien, con pocas dolencias y pocas preocupaciones” (The Lotus Sutra, cap. 15, pág. 214). Después de responder amablemente a sus diversas preguntas, el Buda observa: ”¡Excelente, excelente, buenos hombres! Ustedes saben cómo regocijar en sus corazones a El Que Así Llega”. (The Lotus Sutra, cap. 15, pág. 215). El diálogo de profunda preocupación entre Shakyamuni y los Bodhisattvas de la Tierra es una profunda lección para toda la asamblea. Expone un tono de solemnidad y reverencia por la revelación de la maravilla de la vida en el siguiente capítulo. Sin embargo, este no es el fin de las sorpresas que están por llegar.
   Es apropiado añadir alguna mayor profundidad en cuanto a los líderes de estos Bodhisattvas de la Tierra. Las características de los Cuatro Líderes de los Bodhisattvas que emergieron de debajo de la tierra (Prácticas Superiores, Prácticas Ilimitadas, Prácticas Puras y Prácticas Firmemente Establecidas) están relacionadas con las cuatro virtudes de la humanidad: verdadero yo, eternidad, pureza y felicidad. Desde la perspectiva del Budismo de Nichiren Daishonin, todas estas virtudes se combinan dentro de la Ley Mística (Seikyo Times, mayo de 1988, págs. 64-65).
   En el drama que se despliega, estos bodhisattvas eran algo completamente nuevo y diferente de cualquier cosa que hubiese encontrado la asamblea. En particular, el bodhisattva Maitreya y los numerosos bodhisattvas fueron puestos en su lugar con este encuentro. Ellos se aproximaron a El Que Así Llega y le preguntaron el significado de lo que acababa de ocurrir. Maitreya hizo la solicitud en el contexto de que lo que todos acababan de ver estaba más allá de cualquier cosa que hubiesen experimentado. Ellos nunca habían visto tales bodhisattvas tan bien desarrollados y hermosos. Él le pregunta a Shakyamuni, “A esta multitud de bodhisattvas con su gran dignidad, virtud y diligencia, ¿quién les predicó la Ley, quién les enseñó, los convirtió y los condujo hasta esto?” (The Lotus Sutra, cap.15, pág. 217).
Hay un tono de consternación en la conclusión del soliloquio en verso de Maitreya acerca de la conspicua naturaleza de su llegada y de sus orígenes:
La tierra en las cuatro direcciones tiembla y se abre
y todos ellos irrumpen de allí.
Honrado por el Mundo, ¡desde tiempos pasados
no he visto nada parecido a esto!
Le pido me diga de dónde provienen,
el nombre de la tierra.
¡Yo he viajado constantemente de tierra en tierra
pero nunca he visto algo así!
En toda esta multitud
no hay una sola persona a la que conozca.
De pronto, ellos irrumpieron de la tierra
–le suplico que explique la causa.
Los miembros de esta gran asamblea,
los inmensurables cientos, miles, millones de bodhisattvas,
todos desean ahora saber estas cosas.
Respecto a las causas que gobiernan el comienzo y el fin de esta multitud de bodhisattvas,
poseedores de inmensurable virtud, Honrado por el Mundo,
¡Le suplicamos que disipe las dudas de la asamblea! (The Lotus Sutra, cap. 15, págs. 217/218)
   Antes de responder a Maitreya y los numerosos bodhisattvas, Shakyamuni advierte a todos que está por revelar una poderosa enseñanza:
   Excelente, excelente, Ajita, que hayas preguntado al Buda este asunto tan importante. Todos ustedes deben ponerse sinceramente la armadura de la diligencia y decidir ser firmes en su intención. El Que Así Llega desea, ahora, convocar y hacer constar la sabiduría de los budas; el poder trascendental de los budas, en libre despliegue; la fuerza de los budas, feroz cual león; la potencia enérgica e inmensamente feroz de los budas. (The Lotus Sutra, cap. 15, pág. 218)
   Todos están en suspenso por la respuesta y Shakyamuni no los decepciona. Estos brillantes bodhisattvas son sus discípulos. Es él quien los ha entrenado después de alcanzar la iluminación en el mundo saha. Además, él explica que hasta este momento, estos bodhisattvas habían estado viviendo en el reino de la potencialidad. Fue en el “espacio vacío” debajo del mundo saha. El espacio vacío debajo del mundo saha se refiere a la profundidad fundamental de la vida o la realidad fundamental. Nichiren Daishonin señala que los bodhisattvas que aparecieron del interior de la tierra en el decimoquinto capítulo, “son personas que poseen la Ley fundamental. Esta ‘Ley fundamental’ es Nam-myoho-renge-kyo” (Gosho Zenshu, pág. 751).
   Maitreya y sus colegas bodhisattvas quedan aun más perplejos con esta respuesta. Lejos de aclararle las cosas, les crea un dilema muy difícil de captar para su mente y corazón. Ellos hacen sus cálculos. Dada la extensión de su vida en este mundo, ¿cómo pudo Shakyamuni haber entrenado a estas innumerables legiones de brillantes bodhisattvas? Mientras contemplaban esta imposibilidad, las dudas respecto a su maestro comenzaron a despertarse. No obstante, ellos desafían directamente estas dudas con una pregunta a Shakyamuni:
   “¡Honrado por el Mundo, no hace mucho tiempo desde que alcanzaste la Budeidad, y sin embargo, has podido realizar esta obra tan grande y meritoria! Nosotros tenemos fe en el Buda y creemos que él predica de acuerdo con lo apropiado, que las palabras pronunciadas por el Buda no pueden ser falsas y que el conocimiento del Buda es, en todos los casos, penetrante y universal. No obstante, en el período posterior a la muerte del Buda, si los bodhisattvas que recién comienzan a buscar la iluminación escucharan estas palabras, tal vez no puedan creer en ellas ni aceptarlas, o se vean inducidos a cometer el crimen de rechazar la Ley. Por lo tanto, Honrado por el Mundo, te pedimos que te expliques, para que podamos hacer a un lado nuestra perplejidad y así, en épocas futuras, cuando los buenos hombres escuchen esta cuestión, no alberguen dudas”. (The Lotus Sutra, cap. 15, pág. 221-222)
   Shakyamuni reserva su respuesta para después, de modo que el capítulo termina con el planteamiento de esta pregunta. Uno puede imaginar el rumor en la audiencia acerca de cómo Shakyamuni podía haber entrenado a esta enorme cantidad de discípulos en los cincuenta y tantos años pasados desde que se sentara bajo el árbol bodhi y alcanzara la iluminación. Hay una sensación de expectativa en el aire. Antes se mencionó que la intensidad del drama se calentaba en este capítulo. ¿Podía la asamblea manejar alguna otra sorpresa? Viendo retrospectivamente, la historia del sutra ha tenido una magnífica asamblea que ha llegado para asistir a la prédica de Shakyamuni, una torre del tamaño de casi la mitad de la tierra ha aparecido en el aire, y toda la asamblea también ha sido suspendida en el aire. Una vez que está puesto el escenario, la asombrosa multitud de Bodhisattvas de la Tierra hizo su aparición. Shakyamuni remató esto, diciéndole a la asamblea que es él quien había entrenado a todos estos magníficos bodhisattvas. ¿Qué podía seguir?
   La confusión de la asamblea era de esperar. Quienes creían en las enseñanzas previas al Sutra del Loto, naturalmente, no entenderían cómo habían podido alcanzar este maravilloso estado los Bodhisattvas de la Tierra y, ciertamente, se resistían a verse comparados con las filas de esta clase de bodhisattvas. Es precisamente por esta razón que Shakyamuni usa esta clase de tratamiento de choque para despertar la mente de aquellos discípulos que todavía estaban capturados por doctrinas anteriores. El presidente Ikeda explica:
   Su reacción de sorpresa, conmoción y duda representa la conducta de todos los que creían en las enseñanzas anteriores al Sutra del Loto, y en la enseñanza teórica de este mismo sutra. “Deshacerse de los apegos y provocar la duda” implica dar en tierra con las creencias y convicciones que la gente había sostenido hasta ese momento. Es un golpe decisivo a los pilares de la cosmovisión vigente en la época. Mediante este giro drástico en los valores con los que el pueblo se sentía cómodo y a gusto, Shakyamuni revela su verdadera identidad y su auténtico estado de vida. (Living Buddhism, octubre de 1997, pág. 35)
   De esta manera, la confusión mental de los presentes en la asamblea se extiende más allá del impacto visual de la aparición de estos respetables bodhisattvas. Hasta ese punto, las diversas categorías de discípulos habían puesto su fe en el modelo tradicional del mundo y de las causas que conducían a la Budeidad. Pero sus puntos de vista fueron echados a rodar. La declaración de Shakyamuni de que él había entrenado y desarrollado a esa miríada de bodhisattvas sacude la base de aquello en lo que cree la audiencia. En el “Diálogo sobre el Sutra del Loto”, el presidente Ikeda dice:
Cuando llegamos a la enseñanza esencial, todo lo que Shakyamuni ha enseñando hasta ese punto se revierte por completo. La enseñanza teórica revela una sucesión de importantes doctrinas: la verdadera entidad de la vida, la iluminación de las personas de los dos vehículos (los que escuchan la voz y los pratyekabuddhas), la iluminación de las mujeres, la de las malas personas. Además, se conceden predicciones de iluminación futura a Shariputra, el discípulo más destacado por su sabiduría, y a los demás discípulos del Buda que han comprendido dichas doctrinas.
Pero, en un santiamén, todo pierde sentido. Porque se desploman las premisas sobre las cuales se habían erigido dichas doctrinas. (Living Buddhism, octubre de 1997, pág. 44)
   Shakyamuni refuta lo que había enseñado previamente –que uno se convierte en buda, si lo hace, sólo después de eones de prácticas austeras. Es el inicio de una visión, en la que la iluminación es una condición que es siempre una característica intrínseca de la vida. El impacto de la revelación de Shakyamuni se compara a la revolución copernicana de la visión heliocéntrica del sistema solar. El presidente Ikeda señala que la aparición de los Bodhisattvas de la Tierra es la señal de la liberación humana en todas partes. Es un llamado para despertar a la gente de la resignación y la impotencia.  
   También significa reconocer el valor fundamental en todas las personas. El presidente Ikeda pinta este retrato de liberación humana:
   Al no comprender la grandeza de su propia vida, se apegan a detalles que en realidad no son importantes. La fuerza de los Bodhisattvas de la Tierra es la capacidad fundamental que poseemos nosotros, como seres humanos, de trascender todas las diferencias –de raza, etnia, género o posición social- y guiar a las personas hacia la felicidad. Somos seres humanos comunes, sin artificios ni adornos; somos totalmente humanos e infinitamente valerosos. Este es el orgullo de un Bodhisattva de la Tierra.
   La irrupción de los Bodhisattvas de la Tierra representa un hecho revolucionario, que testimonia la majestuosidad de la fuerza vital humana. Tenemos que transmitírselo a todos los pueblos del mundo. El cambio en la forma de ver al Buda que marca la enseñanza esencial es una modificación clave en la percepción del hombre. (Living Buddhism, octubre de 1997, págs. 47-48)

NOTAS
Mundo saha: Un mundo donde los humanos soportan sufrimientos. En las enseñanzas anteriores al Sutra del Loto, los budas no aparecían en los mundos saha.
2. Mahasattvas: Un “gran ser”, otro término para bodhisattva.

CAPÍTULO DIECISÉIS. “DURACIÓN DE LA VIDA DE EL QUE ASÍ LLEGA (DLS 26/36)
   El capítulo “Duración de la vida de El Que Así Llega” es el puente sobre las aguas de la duda y la incertidumbre. Es una revelación de la verdad de la vida eterna en todo ser viviente así como el medio para comprenderlo. Tenemos a los sabios budistas del Asia Central, la China y el Japón, incluyendo a Nichiren Daishonin, quienes afirman categóricamente que sin la enseñanza fundamental del capítulo “Duración de la vida”, todas las enseñanzas de Shakyamuni serían consideradas como falsas. La serie del “Diálogo sobre el Sutra del Loto” dedica más de diez entregas discutiendo las muchas facetas del capítulo “Duración de la vida” Estas incluyen la metáfora de la flor de loto que florece y da semillas al mismo tiempo para explicar la simultaneidad de causa y efecto; la plena implicancia de la eternidad de la vida del Buda en todas las personas; la activación de la doctrina de los tres mil reinos en un simple momento de vida al mostrar la posesión mutua de los Diez Mundos; la relación entre la vida del mortal común de los “nueve mundos” con el “décimo mundo” de la Budeidad; y la unidad de maestro y discípulo.
   La esencia del capítulo “Duración de la vida” está más allá de la comprensión intelectual –la realidad de la eterna naturaleza de Buda inscrita en el Gohonzon de Nichiren Daishonin.
   Con este prefacio, volvamos a la historia que dejamos al final del capítulo “Irrumpir de la tierra”. Hay una asamblea íntegra, que ha experimentado la prédica de Shakyamuni en toda su extensión y que ahora está al borde de comenzar a dudar de él.
Sintiendo la confusión en la mente de sus oyentes, Shakyamuni exhorta tres veces a su audiencia diciendo que “Deben creer y entender las confiables palabras de El Que Así Llega” (The Lotus Sutra, cap. 16, pág. 224). Los bodhisattvas piden a Shakyamuni que explique la verdad para ellos y prometen escuchar profundamente sus palabras. Shakyamuni explica que mientras todos creen que se sentó bajo el árbol bodhi en Gaya y alcanzó la iluminación suprema, en realidad, originalmente, él había alcanzado la suprema iluminación en un tiempo inimaginablemente atrás. El presidente Ikeda dice:
   El propósito del capítulo “Duración de la vida” es esclarecer que todos los seres vivientes, no sólo Shakyamuni, en realidad han sido budas desde el remoto pasado, y hacer que la gente tome conciencia de esto. Su propósito es abrirle los ojos al pueblo para que perciba la grandiosa vida eterna del universo. Y lo que permite a las personas captar esta vida en forma práctica y concreta es la revelación de Nichiren Daishonin, según la cual Nam-myoho-renge-kyo es la enseñanza implícita en el Sutra del Loto. (Living Buddhism, febrero de 1998, pág. 37)
   Retornando a la escena en la asamblea, los presentes no sólo tenían que intentar adecuarse a la nueva conciencia de que Shakyamuni alcanzó la iluminación muchísimo tiempo atrás, sino también a la idea de que la vida del Buda estuvo presente en el mundo todo el tiempo. Este mundo de la Budeidad está siempre presente en la vida como parte de su estructura integral. Esto, por un lado, crea un temor reverente, y por otro, confusión respecto a quién es el verdadero Shakyamuni. A los ojos de los presentes en la reunión, ciertamente él se ha convertido en algo más que el hombre que ellos conocían, predicando el sutra mientras caminaban de ciudad en ciudad en su natal India. Más allá del tema de cuánto tiempo atrás alcanzó Shakyamuni la iluminación, está la lucha por entender la manifestación de un Buda eterno.
La práctica budista existe para poder purificar nuestra vida hasta un punto en el que podamos experimentar, aunque sólo sea parcialmente al comienzo, nuestra propia vida como eterna. En el capítulo “Duración de la vida”, Shakyamuni explica que quienes están ilusionados y afligidos no pueden ver al Buda, aun cuando esté cerca. El presidente Ikeda comenta acerca del Shakyamuni del capítulo “Duración de la vida” y sobre la naturaleza de la iluminación:
   Por ahora, baste con decir que el buda al que esto se refiere es Shakyamuni en tanto Buda original iluminado desde el remoto pasado. El Buda se denomina “El Que Así Llega”, porque tiene el estado de vida de alguien en quien la Ley Mística se manifiesta a cada momento, sin esfuerzo ni afectación.
   Este dinamismo de la Ley Mística, que palpita eternamente, es la vida eterna en sí mismo. Es la verdadera identidad del Buda, y es, también, el mismísimo Buda original. Por otro lado, es la vertiente de la cual afloran los beneficios disfrutados por todos los budas. Tal como comprendió el presidente Toda, el Buda es la vida misma. Además, este buda original es, en realidad, la fuente de la que brota nuestra vida. En tal sentido, el sutra habla del Buda original como alguien que está al lado. Sin embargo, en su confusión, la gente no puede percibir a esta Budeidad. (Living Buddhism, enero de 1998, pág. 36)
   Aunque el Buda ha estado constantemente presente en un mundo u otro, enseñando la Ley y convirtiendo a los seres vivientes, él enfatiza lo extraordinario que es encontrar a un Buda y la verdadera enseñanza. Él explica que el Buda siente que la gente no está buscando con ardor el Camino del Buda, de modo que pareciera que él entrara en la extinción. Esta acción es otra variante de los “medios hábiles” para encender un espíritu de búsqueda por la sabiduría del Buda. Entonces, El Que Así Llega reaparece para enseñar la Ley. Él explica por qué ha emprendido este gran esfuerzo:
¿Por qué hago esto? El Que Así Llega percibe el verdadero aspecto de los tres mundos, exactamente como es. No existen el flujo ni el reflujo del nacimiento y la muerte; no hay existencia en este mundo y, luego, ingreso en la extinción. No tiene sustancia ni es vacío; no es homogéneo ni diverso. Ni tampoco es como lo perciben los que habitan en los tres mundos. Pero El Que Así Llega ve claramente y sin error todas estas cosas. (The Lotus Sutra, cap. 16, pág. 226)
   En el sutra, Shakyamuni dice: “Buenos hombres, todos los budas y El Que Así Llega predican una Ley como esta. Ellos actúan para salvar a todos los seres vivientes, de manera que lo que ellos hacen es verdadero y no falso” (The Lotus Sutra, cap.16, pág. 227). Para comunicar mejor esta profunda intención del Buda, Shakyamuni relata la “Parábola del médico excelente y sus hijos enfermos”. Situado en el centro del capítulo “Duración de la vida”, se ha convertido en una de las historias más famosas del Sutra del Loto.
   Este médico tiene un gran número de hijos, son cien en total. Un día, él sale de su casa en cumplimiento de una misión. Mientras está fuera, los niños beben un veneno sin saber que era peligroso. El padre retorna a casa y los encuentra retorciéndose de dolor. Él es un renombrado médico, de modo que crea un medicamento que será el antídoto perfecto para el veneno. Los que no están muy afectados aceptan la medicina y se curan. Sin embargo, la mayoría de los niños están completamente afectados por los efectos de la nociva sustancia que han ingerido y rechazan la medicina que su padre les ha preparado. Como un medio hábil, el misericordioso padre sale nuevamente, explicándoles que ha envejecido y no puede permanecer en casa.   
   Después, oyendo de un mensajero que su padre ha fallecido en otra tierra, los niños quedan abrumados por el pesar. Este sufrimiento por la pérdida de su padre les devuelve la razón suficiente como para toma la medicina, que el médico excelente les ha dejado. Ellos se alivian rápidamente del veneno en su cuerpo y en su mente.   
   Cuando sus hijos están sanos, el padre retorna y se reúne con su familia.
   En un nivel, Shakyamuni emplea esta historia para explicar por qué El Que Así Llega usa el medio hábil de la muerte para conducir a los seres vivientes al Camino del Buda.            
   Él quiere que todos los presentes en la asamblea entiendan su profunda misericordia,
a través de la cual ellos pueden liberarse de sus puntos de vista erróneos que les impiden experimentar realmente su propia naturaleza de Buda. Él explica que sus acciones son como las del padre, quien sale para hacer que sus hijos afectados lo echen de menos y beban el antídoto para el terrible veneno que han ingerido.
   En un nivel más profundo es la historia de una misericordia implacable, y la voluntad para hacer cualquier cosa que permita que los seres vivientes comprendan y actúen basados en su verdadera naturaleza. También es una metáfora para la función de la muerte dentro del flujo general de la vida. Esto es representado poéticamente por Shakyamuni en la sección en verso que concluye el capítulo “Duración de la vida”:
Porque si me ven constantemente,
La arrogancia y el egoísmo surgen en su mente.
Abandonando el control, ellos ceden a los cinco deseos
y caen en los malos caminos de existencia.
Siempre estoy consciente de cuáles seres vivientes
practican el camino, y cuáles no,
y en respuesta a sus necesidades para la salvación
yo predico diversas doctrinas para ellos.
En todo momento yo pienso para mí mismo:
¿Cómo puedo hacer para que los seres vivientes
Obtengan el ingreso al insuperable camino
Y adquieran rápidamente el cuerpo de un Buda?
(The Lotus Sutra, cap. 16, págs. 231-232)
   Ya no surgen más preguntas de parte de Maitreya ni de los demás bodhisattvas provisionales. Los miembros de la asamblea prometen creer lo que el Buda ha predicado acerca de la duración de su vida y de su medio hábil de entrar en extinción.  
   La expresión de su voluntad para creer, en cierto modo se ha convertido no más que en una nota al pie de la página, debido a que el foco de la atención se ha trasladado a la práctica y la propagación del Sutra del Loto después de la muerte del Buda. La antorcha es entregada a los Bodhisattvas de la Tierra.
   En esta etapa del sutra, tenemos que pensar acerca de su estructura y movimiento.
   Los siguientes tres capítulos tratan sobre los diversos beneficios que se acumularán de la práctica y enseñanza de este sutra en las épocas futuras. Como preludio a esto, los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” intercambian sus puntos de vista acerca de la exactitud histórica del drama que ha ocurrido a lo largo de los dieciséis capítulos. Ellos exponen la perspectiva de que en los sorprendentes eventos descritos en el sutra estaba la experiencia que tenía lugar en la vida de Shakyamuni y no deben ser tomados literalmente. El presidente Ikeda responde diciendo, “Aunque los hechos descritos en el sutra no son exactos históricamente, sí expresan la verdad acerca de la vida y la naturaleza de la existencia”. (Living Buddhism, enero de 1998, pág. 38)
   Él continúa, explicando que el Sutra del Loto es una enseñanza que muestra el verdadero yo de Shakyamuni. Fue esta la razón que impulsó la necesidad de las dos mitades de la “enseñanza teórica” y la “enseñanza esencial” en el Sutra del Loto. El verdadero yo de Shakyamuni es el yo eterno que es uno con la Ley Mística. Esto significa que todos los Bodhisattvas de la Tierra también están incluidos en el yo eterno de Shakyamuni. La feliz verdad es que este yo eterno está en la médula de la vida de cada persona. Como dice el presidente Ikeda:
   Pero eso no sólo es cierto con respecto a Shakyamuni. El Daisho­nin dice: "El ejemplo de una persona representa la verdad imparcial inherente a todos los seres humanos” (Gosho Zenshu, pág. 564). El “yo eterno” de Shakyamuni es el “yo eterno” de todos los seres vivientes. En sentido amplio, todos los seres son budas originales. Por ende, los Bodhisattvas de la Tierra son los “Bodhisattvas eternos” que existen en la vida de todas las personas. El Daishonin lo explica así: “La vida iluminada del buda Shakyamuni ¿no es, acaso, nuestra carne y nuestra sangre? Sus prácticas y las virtudes que alcanzó a raíz de ellas ¿no son, acaso, nuestros huesos y nuestra médula? (Los principales escritos de Nichiren Daishonin, vol. 1, pág. 64); “En nuestra vida se halla presente el buda Shakyamuni [...], el Buda original del tiempo sin comienzo” (Ibid., pág. 65). Y, también: “Los bodhisattvas Jogyo, Muhengyo, Jyogyo y Anryugyo (3) representan el estado de Bodhisattva que existe dentro de nuestra vida” (Ibid.)

CAPÍTULO DIECISIETE. “DISTINCIÓN DE BENEFICIOS” (DLS 37)
   Los siguientes tres capítulos tienen un tema similar, que documenta el inmenso beneficio que obtendrán los Bodhisattvas de la Tierra y todos los que practiquen, estudien y propaguen el corazón del Sutra del Loto revelado en el capítulo “Duración de la vida”. Se podría pensar que habiendo alcanzado el elevado punto de la declaración del Buda en el capítulo dieciséis, los capítulos siguientes tendrían un clima más relajado. Sin embargo, no es así. Todo lo que sigue al capítulo “Duración de la vida” toma un matiz mucho más profundo, bañado en el brillo de la “Tierra de la luz tranquila”. Se siente un significativo cambio de dirección.
El capítulo “Distinción de beneficios” es un brillante ejemplo de esta transformación. Describe una imponente celebración que se inicia con el agasajo que ofrece Shakyamuni a la audiencia mediante el relato de las fantásticas recompensas que se obtendrán viviendo el espíritu del sutra. Él presenta una larga disertación dirigida a Maitreya, recordándole la vida sumamente larga de El Que Así Llega. Luego, señala que la práctica de la Ley ha hecho posible que “seres vivientes tan numerosos como las arenas de seiscientos y ochenta decenas de miles, millones nayutas de Ganges alcanzaran la verdad del no nacimiento. Y bodhisattvas y mahasattvas en una cantidad mil veces mayor obtienen dharanis1 que les permiten memorizar cientos de miles de decenas de miles de millones de inmensurables repeticiones de enseñanzas” (The Lotus Sutra, cap. 16, págs. 233-234). La narración de los beneficios es extensa, detallada y sorprendente. Los variados resultados de lo que cada grupo alcanza representan el origen del título del capítulo “Distinción de beneficios”. No bastaba con decir, “estas personas recibieron esto y aquellas recibieron eso”, sino, más bien, había que mostrar un espectro muy amplio de los beneficios que se pueden recibir. Asimismo, el efecto acumulativo de detallar la masiva cantidad de receptores de beneficios no deja lugar a dudas acerca de las raíces de la bondad y todas las demás virtudes que se implantarán en aquellos que adhieran al Sutra del Loto y lo propaguen.
   Al término de la descripción de este impresionante cuadro de recompensas, comienza una gigantesca recepción como en un salón de convenciones del tamaño del Gran Cañón. Flores de mandarava caen desde los cielos sobre toda la audiencia. Es crucial no perder contacto con el tono y el fervor del texto real. Para sentir el nivel de alegría en la asamblea y la respuesta de los cielos, tenemos que colocarnos justo en medio de la hipérbole del Sutra del Loto:
Cuando el Buda anunció que estos bodhisattvas y mahasattvas habían obtenido los grandes beneficios de la Ley, de en medio del aire llovió flores de mandarava y grandes flores de mandarava, esparciéndose sobre los inmensurables cientos, miles, decenas de miles, millones de budas que estaban sentados en sus tronos de león bajo árboles enjoyados, y también se esparcieron sobre el buda Shakyamuni, y sobre El Que Así Llega Muchos Tesoros, quien mucho tiempo atrás entró en la extinción, ambos estaban sentados en tronos de león en la torre de los siete tesoros. Ellas también se esparcieron sobre todos los grandes bodhisattvas y las cuatro clases de creyentes.  
   Además, llovió madera de sándalo finamente pulverizado y aloe, y en medio del aire tambores celestiales resonaron espontáneamente, con maravillosas notas profundas y de mucho alcance. Y mil variedades de mantos celestiales llovieron, adornados con diversos collares, collares de perlas, collares de muchas joyas, collares de joyas que conceden deseos, se propagaron por todas partes en nueve direcciones. En incensarios enjoyados ardió el incienso, y su fragancia penetró espontáneamente penetrándolo todo como un ofrecimiento a la gran asamblea. Por encima de cada uno de los budas aparecieron bodhisattvas enarbolando banderas y doseles que llegaban al cielo Brahma.  
   Estos bodhisattvas empleaban sus maravillosas voces para cantar inmensurables himnos de alabanza a los budas. (The Lotus Sutra, cap. 17, págs. 234-235)
   Esta es una celebración de alegría con Shakyamuni conquistando a su audiencia a través de su transformación de la identidad transitoria a la verdadera identidad. Se llega a un punto crucial. La audiencia, junto con todos los dioses celestiales, celebra poderosamente, pero continúa por menos de la mitad de un capítulo. El foco se traslada rápidamente a la preocupación principal de los budas y bodhisattvas respecto a cómo hacer posible que todos los seres vivientes entren al Camino del Buda. En lo que sigue, es evidente que la misericordia del sutra se extiende ilimitadamente hacia delante en el tiempo. Maitreya pronuncia una extensa respuesta en verso a las descripciones de los beneficios hechas por Shakyamuni. La respuesta de Shakyamuni es expresada de manera diferente a sus pronunciamientos previos sobre todos los maravillosos efectos de estar presente en la revelación de la eterna enseñanza del Buda. Ahora, viendo hacia el futuro, él habla  de los seres vivientes que podían llegar a escuchar esta enseñanza de la “Duración de la vida de El Que Así Llega” y los ilimitados beneficios que ellos obtendrán.
   Los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” dedican una considerable discusión para determinar la verdadera naturaleza del beneficio en el Budismo. El presidente Ikeda explica un punto fundamental acerca del beneficio en el Budismo: “En dos palabras, el beneficio es algo inherente a la acción positiva. Los beneficios no nos vienen de afuera: por el contrario, surgen desde adentro de nuestra vida y se manifiestan a través de nuestras propias acciones. Brotan de la misma manera que el agua mana de un manantial. Así son los beneficios” (Living Buddhism, abril de 1999, pág. 31). Trasladándose a la perspectiva de las enseñanzas de Nichiren Daishonin y el significado de la palabra japonesa para beneficio, el presidente Ikeda dice:
Nichiren Daishonin dice: “El carácter ku [contenido en la palabra japonesa kudoku o beneficio] significa eliminar el mal, mientras que el carácter doku quiere decir producir el bien” (Gosho Zenshu, pág. 762). En el Budismo del Daishonin, el beneficio quiere decir desembarazarse de la oscuridad fundamental de la propia vida y extraer el bien. Para manifestar beneficios, necesitamos emprender la práctica del shakubuku, es decir, propagar las enseñanzas del Daishonin. Hacerlo implica refutar las ideas erradas que hacen sufrir al pueblo y compartir con ellos una vida basada en la Ley Mística. (Living Buddhism, abril de 1999, pág. 31)
   Su discusión confirma el beneficio que se recibe de una religión o filosofía de vida válida. Debe encontrar un balance entre el resultado espiritual interior de una condición de vida elevada y el poder para mejorar el medio ambiente material y social. Debe ser plenamente aplicable a las realidades de la vida diaria. También debe fusionar los deseos personales de cada individuo con la felicidad de todas las personas. 
   El presidente Ikeda explica que todo se reduce a la práctica de la fe basada en el capítulo “Duración de la vida de El Que Así Llega” y la convicción que se puede extraer del poder de la relación de maestro y discípulo:
Todos los beneficios que pueden obtenerse mediante la práctica del bodhisattva provienen de la fe en el capítulo “Duración de la vida”. Eso se debe a que los bodhisattvas que llegan al estado de iluminación casi equivalente al del Buda cuando escuchan el capítulo “Duración de la vida”, simultáneamente toman conciencia de la Ley Mística del tiempo sin comienzo. En ese momento, hacen la transición que media ente el nivel del mortal común [myoji-soku] que acaba de abrazar el Sutra del Loto y el nivel del Buda.
   Es como si estuvieran ascendiendo firmemente por una montaña, con la mirada puesta en llegar al estado de iluminación, el estado de la vida del Buda. Pero cuando llegan a la cumbre, a la cima del capítulo “Duración de la vida”, ¿qué ven, qué clase de escenario se despliega frente a ellos? Perciben que el Buda verdadero, iluminado desde el tiempo sin comienzo, desarrolla actividades incansables y constantes en este mundo, para guiar a todas las personas hacia la iluminación. Comprenden que ellos mismos han recibido enseñanza de él en el pasado. Y advierten que ellos mismos, en forma primigenia, han estado unidos por una relación de maestro y discípulo con el Buda inseparable del universo. (Living Buddhism, abril de 1999, págs. 37-38)

NOTA
Dharani: Un hechizo o fórmula que, según se decía, protegía a quien la recitaba y beneficiaba a la persona en virtud de su poder místico.

CAPÍTULO DIECIOCHO. “LOS BENEFICIOS DE RESPONDER CON ALEGRÍA” (DLS 38)
   El capítulo dieciocho se titula “Los beneficios de responder con alegría” porque describe, en detalle, los inmensos beneficios que reciben aquellos que escuchan la enseñanza del Sutra del Loto, responden con alegría y la enseñan a otros. El presidente Ikeda lo explica simplemente:
Cuando “respondemos con alegría” recibimos “beneficios”; en esencia, éste es el significado del título. En otras palabras, recibimos grandes beneficios en la medida en que nuestro esfuerzo en la fe se lleva a cabo con alegría. Nuevamente, vemos que el corazón o la postura son lo más importante. Si uno va a practicar el Budismo, lo mejor es que lo disfrute y no que rezongue o lo haga a regañadientes.
   Cuando uno enfrenta un desafío, ¿suspira hondo y dice “¡Ay, no, otra vez no!”? ¿O le hace frente sin vueltas decidido a utilizar la situación para adquirir mayor buena fortuna? Esta pequeña diferencia en la actitud determina, a la larga, un mundo de diferencia. (Living Buddhism, junio de 1999, pág. 20)
   De acuerdo con el modelo de diálogo para revelar las verdades budistas, el capítulo se inicia con la pregunta de Maitreya referida a los beneficios que se pueden obtener al regocijarse escuchando acerca del Sutra del Loto. Shakyamuni aprovecha la oportunidad para discutir el potente poder de la Ley para alcanzar a la quincuagésima persona con méritos siempre crecientes, como impactó en la primera persona que escuchó de ella y luego la compartió con otros. Esta es una cadena de alegrías que enseña dos puntos. Primero, que el grado del beneficio por escuchar la Ley es equivalente a la alegría con que responde el oyente, y segundo, es la acción para compartir esta alegría con los demás.
   Shakyamuni explica que la Ley pura asegura que los beneficios que fluyen hasta la quincuagésima persona no disminuyen en absoluto. Esto es diferente a los rumores o los chismes, cuyos contenidos cambian conforme se transmiten de una persona a la siguiente. El presidente Ikeda explica que el compartir la médula del Sutra del Loto trasciende la enseñanza teórica y busca transformar el medio ambiente humano y también el medio ambiente natural:
   El kosen-rufu también abarca la lucha por transformar la realidad del ambiente. Este es el significado del ichinen sanzen real, como opuesto al teórico.
En cualquier circunstancia, la propagación de una persona a la siguiente y, así, hasta la quincuagésima, es el camino democrático del diálogo. La democracia, sin duda alguna, no es sólo cuestión de establecer determinadas formas e instituciones. Sin “contenido”, la democracia no es más que un recipiente vacío, fácil de aplastar.
   ¿Cuál es este “contenido”? La autosuperación y la autonomía de cada persona, capaz de depender de sí misma. Es decir, la felicidad individual. La democracia debe permitir a cada individuo de la sociedad vivir al máximo. Sin valorar la dignidad del individuo, la democracia  es un simple rótulo. (Living Buddhism, junio de 1999, pág. 25)
   Shakyamuni continúa dando ejemplos específicos de cómo una persona debe propagar efectivamente el corazón del Sutra del Loto. El presidente Ikeda explica que este capítulo brinda claras orientaciones sobre la transmisión del Budismo y quién, en realidad, está poniéndolas en práctica:
   La “transmisión” es el kosen-rufu. La parte llamada “transmisión” que hemos comenzado ha estudiar está llena de orientaciones referidas a la amplia propagación de la Ley Mística. Es notable que, en los tres mil años de historia budista, sólo nosotros, en la SGI, hayamos podido comprender este capítulo basados en la experiencia real. (Living Buddhism, junio de 1999, págs. 21-22)

CAPÍTULO DIECINUEVE. LOS BENEFICIOS DEL MAESTRO DE LA LEY. (DLS 39)
   El capítulo diecinueve explica que los beneficios de quienes llevan a cabo las cinco prácticas de abrazar, leer, recitar, enseñar y transcribir el Sutra del Loto recibirán el beneficio de la purificación de los seis órganos de los sentidos. El Buda habla al bodhisattva Esfuerzo Constante, enumerando los beneficios que se acumulan de los órganos de los sentidos:
   Si buenos hombres o buenas mujeres aceptan y mantienen este Sutra del Loto, si lo leen, recitan, explican y predican, o lo transcriben, dichas personas obtendrán ochocientos beneficios visuales, mil doscientos beneficios auditivos, ochocientos beneficios olfatorios, mil doscientos beneficios gustativos, ochocientos beneficios corporales y mil doscientos beneficios mentales. Con todos ellos, podrán adornar sus seis órganos sensoriales y purificarlos. (The Lotus Sutra, cap. 19, pág. 251)
   El Que Así Llega prosigue para explicar uno por uno tanto la función y el efecto de los principales beneficios para cada uno de los seis órganos. La cantidad de detalles hace que sea un capítulo extenso. Un ejemplo de un beneficio de la lengua es que cualquier sabor, sea amargo o no, se transformaría en algo soberbio. Además, si la persona que ha logrado estos beneficios usa su lengua por predicar, hará que todos sus oyentes se regocijen y deleiten. Los seres de todas las categorías llegarán para escuchar la enseñanza de la Ley. Los atributos del usuario de la voz con beneficios de la lengua son sorprendentes para contemplar. El atributo final es uno que no debe pasarse por alto, “Y, además, él podrá emitir el profundo y maravilloso sonido de la Ley”.
   La purificación de los seis órganos de los sentidos no es una limpieza ritual. Se pone en marcha emprendiendo la acción de bodhisattva. Es el cambio del karma que experimentamos propagando el Budismo de Nichiren Daishonin. Cuando somos censurados hablándole a los demás acerca del Budismo, nuestra vida se purifica. El presidente Ikeda cita la orientación del segundo presidente de la Soka Gakkai, Josei Toda, quien le dijo a los miembros que fuesen agradecidos por las respuestas descorteses cuando realizaban la propagación porque limpia el karma negativo que los ha apartado de la felicidad.
   Los beneficios del sexto sentido son los de la mente. El presidente Ikeda los une vinculando la mente de todas las demás funciones:
   A través de la purificación de la mente, los practicantes se vuelven más sabios. En existencia tras existencia, pueden llegar a ser grandes eruditos o personas de penetración insuperable.
   En síntesis, purificar los seis órganos sensoriales significa transformar completamente nuestra vida para que esta sea un “vehículo” del kosen-rufu. Acá no estamos hablando de tácticas ni de astucia; cuando trabajamos con sinceridad y pureza por el kosen-rufu, sin escatimar la vida, todo nuestro ser rebosa de fuerza vital sin límites. La vida se irriga de vitalidad, sabiduría y benevolencia.
Alguien podrá envejecer y perder la vista, pero si puede mover las manos, puede escribir cartas. Y si puede mover la boca, puede hablar por teléfono. No es cuestión de sobreexigirnos irrazonablemente. Lo importante es que nuestro corazón arda de “espíritu de lucha”. Manifestar esta fe purifica los seis órganos sensoriales.
   Por muchas preocupaciones o problemas que tengamos, podemos convertirnos en fuente de valor y de beneficios. Esta gran fuerza vital es el beneficio que obtiene un maestro de la Ley.
   En conclusión, los que viven su vida junto a la SGI, la organización que se dedica a concretar la voluntad del Buda, y trabajan por la paz y la felicidad de las personas con actitud pura y sincera, transitan por el camino supremo en la vida.
   La persona que avanza en forma constante y perseverante va a triunfar sin falta. La persona que invoca daimoku en todas las situaciones, al final, va a obtener la victoria absoluta.

CAPÍTULO VEINTE. "EL BODHISATTVA JAMÁS DESPRECIAR" (DLS 40)
   Shakyamuni se dirige al bodhisattva Gran Autoridad acerca de la era de El Que Así Llega Rey del Sonido Imponente, quien existió en el pasado increíblemente distante. En realidad, hubo un linaje de veinte mil millones de budas con este mismo nombre.   
   Después de que el primer El Que Así Llega entrara en la extinción y su Ley se corrompiera, monjes malvados ganaron gran autoridad y poder. En esta época, hubo un bodhisattva llamado Jamás Despreciar. Él sufrió considerables abusos de manos de monjes y laicos arrogantes. Ellos hablaban negativamente de él y lo atacaban por su comportamiento de jamás despreciarlos. Ellos consideraban que era vano e irresponsable que predijera su eventual Budeidad a pesar de su comportamiento.
   Muchos años pasaron de esta manera, durante los cuales este monje estuvo constantemente sujeto a maldiciones y abusos. Sin embargo, él no cedió a la ira, sino que cada vez repetía las mismas palabras, “Obtendréis sin falta la Budeidad”. Cuando él hablaba de esta manera, algunos entre el grupo tomaban varas y piedras y lo golpeaban y azotaban. Pero aun cuando corría y se ponía a buen recaudo a buena distancia, él continuaba diciéndoles en voz alta, “Jamás osaría trataros con desprecio o arrogancia. ¿Por qué? Porque todos estáis practicando el camino del bodhisattva y obtendréis sin falta la Budeidad”. Y debido a que siempre repetía estas palabras, los monjes, monjas y los hombres y mujeres laicos despóticos y arrogantes le dieron el nombre de Jamás Despreciar.
   Cuando este monje se hallaba al borde de la muerte, escuchó plenamente en el cielo veinte mil decenas de miles de millones de versos del Sutra del Loto que antes había predicado el buda Rey del Sonido Imponente, y pudo aceptarlos y abrazarlos. De inmediato, obtuvo la pureza de visión y la pureza de los órganos sensoriales del oído, la vista, el tacto, el gusto, el olfato y la mente anteriormente descritas. Con estos seis sentidos purificados, incrementó la duración de su vida en doscientos diez mil millones de nayuta de años, y continuó propagando ampliamente el Sutra del Loto en bien de todas las personas. (The Lotus Sutra, cap. 20, pág. 267)
   Con su apariencia digna y su voz maravillosa, él pudo convertir a todos aquellos que anteriormente se le oponían. Shakyamuni revela que este bodhisattva Jamás Despreciar, en realidad, era él mismo en una existencia previa. Él también explica que quienes lo trataron previamente irrespetuosamente, estaban ahora en la asamblea en el aire dando fe de todo lo que había revelado. Él explica la manera en que el Sutra del Loto puede beneficiar a todas las personas, aun cuando al comienzo hayan estado en contra de la enseñanza.
   Esta es una lección que Shakyamuni deseaba transmitir para el futuro, de modo que después de su extinción, nadie dudara en propagar el sutra, afronten una oposición injusta. El capítulo “El bodhisattva Jamás Despreciar” representa una nueva fase de la porción de la transmisión en el Sutra del Loto. El Buda ha sido tan extenso y detallado como podía al pintar una representación de los beneficios que se recibirían por llevar a cabo la propagación. Ahora era el momento de preparar a sus discípulos para los obstáculos y las dificultades que afrontarían al propagar la magnífica Ley del loto. La historia de las encarnaciones como el bodhisattva Jamás Despreciar y su actual rol como El Que Así Llega Shakyamuni muestra la gran buena fortuna que se obtendrá por no ser derrotados por los obstáculos en la propagación.
   La declaración del bodhisattva Jamás Despreciar es denominado, a menudo, como el Sutra del Loto de veinticuatro caracteres. Es una declaración compacta que contiene la misericordia para preocuparse profundamente por la vida de los demás y la convicción de que todos los seres vivientes poseen la naturaleza de Buda. En el “Diálogo sobre el Sutra del Loto”, el presidente Ikeda discute la esencia del bodhisattva Jamás Despreciar del Sutra del Loto:
   ¿Qué es lo que el Sutra del Loto explica? La esencia se condensa en este pasaje: “Te respeto profundamente. Jamás te menospreciaría ni me comportaría en forma arrogante contigo. Pues si llevas a cabo la práctica del bodhisattva, podrás ser un buda sin falta. Todos los seres vivientes poseen la naturaleza de Buda, el estado de Budeidad. Es este estado de iluminación potencial lo que reverencia Jamás Despreciar.
   El Sutra del Loto de veintiocho capítulos no dice explícitamente que todas las personas poseen la naturaleza de Buda. Pero este pasaje, sin duda, lo afirma. Esta es la filosofía suprema de la dignidad de la vida.
Aunque hay muchas religiones que predican la “igualdad”, a menudo lo que quieren decir es que todos los seres humanos son pecadores por igual. Pero el Sutra del Loto señala que todas las personas son nobles hijos del Buda, todos son iguales como entidad del estado de Budeidad. Esto marca una diferencia muy importante. (Living Buddhism, agosto de 1999, pág. 20).
   La presentación de las acciones del bodhisattva Jamás Despreciar en este capítulo, es una declaración de revolución religiosa a través de la no violencia. Como dice el presidente Ikeda, “El bodhisattva Jamás Despreciar y el Sutra del Loto se oponen a toda forma de violencia. El Sutra del Loto es una enseñanza de lucha en el nivel espiritual, no de confrontación violenta”. (Living Buddhism, agosto de 1999, pág. 20).
Finalmente, la práctica del bodhisattva Jamás Despreciar es el coraje de propagar la Ley.

CAPÍTULO VEINTIUNO. “LOS PODERES SOBRENATURALES DE EL QUE ASÍ LLEGA”. (DLS 41)
   El desafío de la transmisión de la Ley es enorme. Esto se hace evidente en el tono de urgencia que presenta el capítulo “Los poderes sobrenaturales de El Que Así Llega”. Este capítulo tiene gran importancia en el Budismo de Nichiren Daishonin porque contiene la ceremonia de transferencia de la responsabilidad para poner en práctica las enseñanzas del Buda después de su muerte. En este punto de la historia, los Bodhisattvas de la Tierra que irrumpieron en el capítulo quince reciben su misión.
   Continuando con el flujo del capítulo anterior, el inicio del capítulo “Los poderes sobrenaturales de El Que Así Llega” encuentra a los Bodhisattvas de la Tierra jurando propagar ampliamente el Sutra del Loto después de la muerte de Shakyamuni. Antes de que Shakyamuni les confiara esta misión, él hace hincapié en la importancia de esta transferencia con una demostración de diez poderes sobrenaturales, que son:
El Buda extiende su lengua ancha y larga hasta que llega al cielo de Brahma;
De cada poro de su cuerpo brotan incontables rayos de luz, que alumbran todos los mundos de las diez direcciones; Los budas carraspean al unísono, y el sonido llega a los mundos de las diez direcciones. Chasquean los dedos, y el sonido llega a los mundos de las diez direcciones; Todas las tierras de las diez direcciones se estremecen de seis formas distintas; Todos los seres de los mundos de las diez direcciones contemplan a los budas en el mundo saha y se regocijan; Los dioses celestiales proclaman a los seres de las diez direcciones que deberán respetar y dar ofrendas al buda Shakyamuni; Al escuchar esta proclama, todos los seres de las diez direcciones juntan las palmas de sus manos y saludan al Buda; Los seres se diseminan a lo largo del mundo saha ofrendando diversos tesoros, que se acumulan como una gigantesca nube y forman un dosel enjoyado por sobre los budas allí congregados; y Se libera el pasaje entre todos los mundos de las diez direcciones, como si todos ellos formaran una única tierra de Buda. (Living Buddhism, octubre de 1999, pág. 25)
   En el “Diálogo sobre el Sutra del Loto”, el presidente Ikeda vuelve a enfocar el tema de los poderes sobrenaturales en los seres humanos. Él dice: ”Podría parecer que hay algo fantástico en este despliegue de facultades sobrenaturales. Pero debemos tener en mente que representan funciones de la vida” (Living Buddhism, setiembre de 1999, pág. 31)
   Después de la demostración de estos poderes, Shakyamuni se dirige al bodhisattva Prácticas Superiores, la figura central de los Bodhisattvas de la Tierra. El Honrado por el Mundo explica que uno de los propósitos de la pompa de los poderes sobrenaturales es impresionar a toda la audiencia con el trascendental impacto de la Maravillosa Ley del Loto. En especial, él quería demostrar esto dentro del contexto de la transferencia o encargo de sus enseñanzas a sus sucesores a quienes él había entrenado. Esta demostración también crea una norma para medir los beneficios obtenidos de la práctica del Sutra del Loto.
   El beneficio es tan grande precisamente porque el Sutra del Loto es la absoluta quintaesencia de las enseñanzas del Buda. Él no deja dudas sobre este punto en sus palabras de transferencia al bodhisattva Prácticas Superiores:
   Para decirlo en pocas palabras, todas las doctrinas en posesión de El Que Así Llega, todos los poderes sobrenaturales libremente ejercitados por El Que Así Llega, todas las cuestiones de máxima profundidad de El Que Así Llega, se encuentran proclamados, revelados y claramente expuestos en este sutra. (The Lotus Sutra, cap. 21, pág. 274)
   El presidente Ikeda brinda una idea acerca de la alabanza por el beneficio del sutra, “Shakyamuni no sólo está elogiando el beneficio del Sutra del Loto. A decir verdad, está alabando el beneficio acumulado por la persona que mantenga este sutra después de su muerte; es decir, el beneficio del bodhisattva Prácticas Superiores. Este es el propósito”. (Living Buddhism, octubre de 1999, pág. 25). El siguiente segmento de la sección en verso del capítulo refuerza esto:
Porque desean encomendar este sutra,
alaba y ensalzan a la persona que lo acepta y
lo mantiene, y aunque lo hicieran durante inmensurables
kalpas, así y todo jamás terminaría de proferir elogios.
Los beneficios obtenidos por una persona así
son ilimitados e inextinguibles,
como el vasto cielo de las diez direcciones
al cual nadie puede fijarle límites. (The Lotus Sutra, cap. 21, pág. 275)
   Habiendo demostrado sus poderes sobrenaturales como preludio para la transferencia de la Ley, finalmente Shakyamuni está listo para hacer su proclama para el legado específico de la futura propagación del Sutra del Loto a los Bodhisattvas de la Tierra y su líder, el bodhisattva Prácticas Superiores.
   “Por esta razón, después de que El Que Así Llega ha entrado en la extinción, uno debe aceptarlo, mantenerlo, leerlo, recitarlo, explicarlo, predicarlo y transcribirlo, y practicarlo como está instruido. En cualquiera de las diversas tierras, siempre que haya quienes lo acepten, mantengan, lean, reciten, expliquen, prediquen, y transcriban o practiquen tal como está instruido, o siempre que los rollos del sutra se preserven, sea en un jardín, un bosque, bajo un árbol, en alojamientos de monjes, en habitaciones de laicos con mantos blancos, en palacios, o en valles montañosos o en grandes desiertos, en todos estos lugares uno debe erigir torres y ofrecer limosnas. ¿Por qué? Porque uno debe entender que esos son lugares de práctica religiosa. En esos lugares los budas han obtenido el anuttara-samyak-sambodhi, en esos lugares los budas han girado la rueda de la Ley, en esos lugares los budas entraron al parinirvana” (The Lotus Sutra, cap. 21, pág. 274-275)
   Con esta transferencia específica hecha en la Ceremonia en el Aire, es importante llegar a su esencia para comprender lo que podría tener para nosotros, desde la perspectiva del Budismo de Nichiren Daishonin. Con este fin, el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” contiene una vívida discusión acerca de la naturaleza de la causa y el efecto y los atributos del Buda que existen desde el tiempo sin comienzo. Ellos luchan con la idea de la identidad del bodhisattva Prácticas Superiores como el representante de los Nueve Mundos, que portan inherentemente la causa de la Budeidad y el medio para activarlo a través de su práctica como bodhisattva. El presidente Ikeda retorna al punto principal de la Ley Mística.
   “Shakyamuni está alabando el beneficio de ‘El Que Así Llega Nam-myoho-renge-kyo’ que corporifica la inseparabilidad entre la Persona y la Ley.
   El Shakyamuni que obtuvo la iluminación en el remoto pasado y el bodhisattva Prácticas Superiores son ‘manifestaciones transitorias’ de El Que Así Llega Nam-myoho-renge-kyo, el ‘Buda fundamental’ del universo.
   El Que Así Llega Nam-myoho-renge-kyo es el Buda cuya vida no tiene comienzo ni fin; es la vida universal en sí misma; el origen de todos los budas del tiempo y del espacio. (Living Buddhism, octubre de 1999, págs. 26-27)

NOTAS
Mundo saha: un mundo donde los humanos soportan sufrimientos. En las enseñanzas anteriores al Sutra del Loto, los budas no aparecían en los mundos saha.
Kalpa: Un período de tiempo extremadamente largo de acuerdo con la antigua tradición india.
Parinirvana: Un término similar al nirvana, utilizado en referencia al aparente fallecimiento del cuerpo físico del Buda.

CAPÍTULO VEINTIDÓS. “LA TRANSFERENCIA” (DLS 45)
   El capítulo “La transferencia” es la terminación de la transmisión de la Ley, de parte de Shakyamuni, a los bodhisattvas restantes de la asamblea. En el capítulo anterior, “Poderes sobrenaturales de El Que Así Llega”, hubo una transmisión específica del bodhisattva Prácticas Superiores y todos los Bodhisattvas de la Tierra. La transmisión general lega las enseñanzas del Buda a todos los seres vivientes. De una manera sincera, el Buda acaricia tres veces la cabeza de cada miembro de la asamblea y les confía la propagación del Sutra del Loto a ellos, de modo que sus beneficios se hagan ampliamente conocidos. Nichiren Daishonin explica el significado de esto en “El registro de las enseñanzas transmitidas oralmente”.
   “En este capítulo, el Buda les acaricia la cabeza a los bodhisattvas y les transmite la enseñanza, para asegurar que esta Ley prodigiosa perdure en el mundo una vez que él haya entrado en la extinción.
   “Y ya que esto representa la transmisión de la Ley prodigiosa, los bodhisattvas a quienes se les efectúa la transferencia son todos los seres vivientes de los Diez Estados y de los tres mil aspectos” (Gosho Zenshu, pág. 800).
   Desde la perspectiva de Nichiren Daishonin, todos se convierten en un bodhisattva.  
   Desde la perspectiva del Sutra del Loto, los Bodhisattvas de la Tierra recibieron la esencia de las enseñanzas de Shakyamuni de las profundidades del capítulo “Duración de la vida”, mientras que lo que Shakyamuni transfirió en el capítulo “La transferencia” fue todo el conjunto de sus enseñanzas. En un sentido, esto podría ser considerado como proporcionar las herramientas para los períodos de tiempo de los días del Primero, Medio y Último de la Ley de El Que Así Llega Shakyamuni.
   Esto se refleja en el mensaje de transmisión de Shakyamuni. Al hacer la transferencia de sus enseñanzas, Shakyamuni explica que no conoce el miedo, que no es mezquino y que no es egoísta. Él dice que ser un Buda significa tener misericordia.  
   Él concede sabiduría a los seres vivientes. Con estos ejemplos, Shakyamuni exhorta a la asamblea a actuar de manera similar: “Ustedes, por su parte, deben responder estudiando esta Ley de El Que Así Llega. No deben ser mezquinos ni egoístas” (The Lotus Sutra, cap. 22, pág. 278).
   Luego los instruye respecto a cómo llevar a cabo la prédica de la Ley:
   En las épocas futuras, si hay buenos hombres y buenas mujeres que tengan fe en la sabiduría de El Que Así Llega, deben predicar y exponer el Sutra del Loto para ellos, de modo que otros puedan escuchar y entenderlo. Porque de esta manera pueden hacer que obtengan la sabiduría del Buda. Si hay seres vivientes que no creen y no lo aceptan, deben utilizar alguna de las otras profundas doctrinas de El Que Así Llega para enseñarles, beneficiarles y darles alegría. Si hacen esto, habrán saldado la deuda de gratitud que tienen con los budas. (The Lotus Sutra, cap. 22, pág. 278)
   No se debe pasar por alto que esta es una promesa de beneficios diferente a la descripción de beneficios anterior, ya que aquella prometía que incluso un momento de fe crearía la causa para la iluminación. Esto es evidentemente diferente a la orden de transmisión del sutra. Los bodhisattvas y mahasattvas se regocijan y sienten una gran alegría que recorría todo su cuerpo. Elevan sus voces, prometiendo llevar a cabo las instrucciones del Honrado por el Mundo.
Este encargo final señala la conclusión de la Ceremonia en el Aire. Incluso cuando los bodhisattvas estaban expresando su decisión, Shakyamuni ya estaba enviando a todos los budas de las diez direcciones de retorno a sus mundos. Las puertas de la Torre de los Tesoros se cierran en su preparación para partir hacia los lejanos confines del universo. Con la conclusión de la ceremonia, todos se dirigen a cumplir su respectiva misión.
   La escena retorna al Pico del Águila y la asamblea original de los discípulos de Shakyamuni que estaban presentes durante el primer capítulo, cuando el Buda comenzó a predicar. Inesperadamente, ellos se encuentran girando en los sucesos fantasmagóricos del Sutra del Loto. Desde la perspectiva del principio de las “tres asambleas en los dos lugares”, esta porción del sutra es el final de la segunda asamblea y el comienzo de la tercera. Es consistente con la explicación de los dos lugares en que la locación de la escena vuelve a ser la misma de la primera asamblea.
Los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” ven dos significados en la conclusión de la ceremonia de transmisión. El primero es el de la promesa hecha por todos, incluyendo a los Bodhisattvas de la Tierra, de aceptar el legado de la Ley que les hace el Buda. Además de la voluntad de los bodhisattvas y todos los demás seres de emprender la tarea de la propagación ahora y en el futuro, hay otra conexión que es crucial –la relación maestro y discípulo. El presidente Ikeda explica:
   Desde el punto de vista de aquellos que reciben la misión, es el capítulo en que los discípulos juran afrontar la dura tarea de propagar la Ley. Esto define su vínculo de maestro y discípulo.
   La relación mentor y discípulo es muy rigurosa. Todo depende de la seriedad con que uno sea capaz de tomar cada palabra de su maestro y de actuar basado en ella. Un auténtico discípulo se esfuerza por concretar la visión de su maestro; pero esto no significa repetir sus palabras, sino ponerlas en práctica. (Living Buddhism, enero de 2000, pág. 31)
   El segundo punto importante es el hecho de que la Ceremonia en el Aire haya concluido y los participantes hayan retornado a sus tierras originales. Este cambio de lugar, desde la ceremonia cósmica a los riscos rocosos del Pico del Águila, significa la misión del bodhisattva de ejercitar su coraje, misericordia y sabiduría en la realidad del mundo terrenal. Esta misión incluye ayudar a otros seres humanos a practicar el Budismo.

CAPÍTULO VEINTITRÉS. “ASUNTOS PASADOS DEL BODHISATTVA REY DE LA MEDICINA”(DLS 46)
   Como se explicó en el capítulo anterior, la Ceremonia en el Aire termina con el retorno de Shakyamuni y sus discípulos a la tierra. El capítulo veintitrés señala todavía otra transición en la odisea terrenal y celestial que es el Sutra del Loto de Shakyamuni. Esta transición es diferente porque la historia que comenzó en el primer capítulo del Sutra del Loto ha concluido ahora con el capítulo “La transferencia”. La misión está cumplida, de manera que parecería que se ha alcanzado una parada natural. Sin embargo, el Sutra del Loto tiene seis capítulos más.
   Antes de continuar con los seis capítulos finales, hay preguntas que se deben responder: ¿Hasta dónde hemos llegado? Y, ¿hacia dónde vamos a partir de aquí? En el “Diálogo sobre el Sutra del Loto”, los participantes hablan sobre el significado de esta transición. Cada cambio anterior ha tenido sus propias características y objetivos. Revisemos lo que ha surgido en los veintidós capítulos anteriores. El escenario y la audiencia fueron establecidos en el capítulo uno y luego creció hasta proporciones inimaginables. A través de su prédica y sus poderes sobrenaturales, así como de la llegada de mensajeros desde la lejanía, el mensaje de El Que Así Llega Shakyamuni ha sido ampliamente transmitido. Las lenguas de millones de budas lo han verificado más allá de toda duda. Por su propia cuenta, el Buda ha utilizado parábolas, semejanzas, metáforas y orientaciones para comunicar el corazón del Budismo y cómo vivir de acuerdo con su enseñanza.
   Dentro de esta vasta epopeya, el episodio central de los principales eventos que se desarrollan es el de la increíble Torre de los Tesoros. Este magnífico estupa tiene el tamaño de un cuarto de la tierra y flotaba en el aire. Alrededor de toda esta plataforma cósmica, se mostró a la asamblea sorprendentes demostraciones de los beneficios que se originan por tener fe en el Sutra del Loto y practicarlo. Un tipo de bodhisattvas totalmente nuevo –aquellos cuya vida está enraizada en la médula de la existencia misma– aparecen en escena. La conexión esencial del latido de la vida diaria con la eternidad fue representada como parte de las revelaciones en el capítulo “Duración de la vida de El Que Así Llega”. La Maravillosa Ley del Sutra del Loto fue transmitida y legada a los Bodhisattvas de la Tierra, y luego a todos los demás bodhisattvas, los que escuchan la voz, las cuatro clases de creyentes, humanos y todos los demás seres vivientes. La conclusión se hace evidente –aquellos a quienes se confió la Ley deben asegurar que la Ley del Buda y el camino del Buda florezcan en las épocas futuras después de que el Buda entre en la extinción. Al final del capítulo veintidós, los participantes y la audiencia de la Ceremonia en el Aire han retornado a sus reinos y actividades anteriores.
   Este es un final aparente para el argumento de la historia primaria del sutra. Si bien la transmisión de la Ley ha terminado en el capítulo veintidós, continúan seis capítulos completos más. ¿Cuál es el propósito de estos capítulos adicionales? Desde el punto de vista de Nichiren Daishonin, este material adicional es como recoger metáforas y modelos de comportamiento de la rica cosecha de la sabiduría del Buda para estar más seguros de que la Ley sea propagada. El presidente Ikeda aclara el objetivo del hecho de que Shakyamuni continúe, “En los seis, lo que palpita es el deseo de Shakyamuni de mostrar a todas las personas, sin excepción, el camino de la Budeidad, y de lograr la amplia propagación de la Ley Mística, por muchas dificultades que esta labor llegue a entrañar” (Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 32).
   Los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” discuten la idea popular de que estos capítulos podían haber sido añadidos al conjunto principal del sutra por editores posteriores. Esta idea se ve reforzada por el hecho de que cada capítulo es independiente, como una ilustración de la vida y las actividades de diversos budas y bodhisattvas de otras épocas y reinos. Un peso adicional para esta perspectiva es que no hay una continuidad narrativa entre ellos. Sin embargo, el presidente Ikeda ve un contexto más profundo que los une.
   “Con todo, los seis capítulos no son sólo un agregado. Desde el punto de vista de las "“tres asambleas en los dos lugares”, en estos seis capítulos transcurre la segunda asamblea en el Pico del Águila (que viene después de la primera asamblea [capítulos 1 a 11]) y de la Ceremonia en el Aire [capítulos 11 a 22]. Esta parte esclarece la importante función de los bodhisattvas que regresan a la sociedad real, para llevar consigo, profundamente grabada en su corazón, la eterna Ley Mística que les fue revelada durante la Ceremonia en el Aire”. (Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 32).
   La audiencia no ha regresado a la tierra igual que como partió de la primera asamblea en el Pico del Águila para ascender al espacio. Más bien, han retornado con una condición de vida enormemente elevada y una sabiduría incrementada como resultado de su experiencia. Ahora están pletóricamente conscientes de la naturaleza eterna e infinita de El Que Así Llega Nam-myoho-renge-kyo.
   Dada esta elevada condición de vida de la asamblea original, se puede interpretar que cada uno de los seis capítulos adicionales ofrece importantes lecciones respecto a cómo pueden los bodhisattvas llevar a cabo, de la manera más apropiada, su misión para propagar la Ley.
   El presidente Ikeda nos alienta a observar los ejemplos de cada capítulo como maravillosos roles modelos de misericordia, sabiduría y coraje, así como el espíritu de mentor y discípulo.
   “Cada bodhisattva, que cree en Nam-myoho-renge-kyo contenido en las profundidades del capítulo ‘Duración de la vida’ (dieciséis) y lo acepta profundamente, muestra pruebas concretas de la Ley Mística en su respectivo campo de actividades.  
   Ponen a prueba la Ley, demuestran su validez y, luego, la propagan. Probablemente por eso, los bodhisattvas que aparecen en estos seis capítulos poseen aspectos y capacidades tan variados y diversos” (The Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 32).
   Los bodhisattvas de la enseñanza esencial no tienen atributos ostentosos. Son modestos por naturaleza. Incluso los nombres de los cuatro líderes de los Bodhisattvas de la Tierra implican sencillamente su función.: Prácticas Superiores, Prácticas Ilimitadas, Prácticas Puras y Prácticas Firmemente Establecidas. El presidente Ikeda explica la razón de esta diferencia:
   Se encuentran en un nivel diferente. Los nombres de estos cuatro bodhisattvas representan funciones de la Ley Mística, y puede comparárselos con la “luna en el cielo”. Su misión es, sencillamente, propagar la Ley Mística. Es lo que indica el Daishonin cuando dice: “La acción desempeñada por los bodhisattvas de la enseñanza esencial es [propagar] Nam-myoho-renge-kyo” (Gosho Zenshu, pág. 751). (Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 33).
   Con esta perspectiva de encontrar las joyas ocultas para realzar nuestra propagación de la Ley, somos más capaces de aproximarnos a los sucesos del capítulo “Asuntos pasados del bodhisattva Rey de la Medicina”. La lección en este capítulo, trata acerca de los esfuerzos para alcanzar la unidad de mentor y discípulo. También ilustra el espíritu para proteger a los practicantes del Sutra del Loto.
   En armonía con la forma del diálogo que ha caracterizado todo el sutra, el capítulo comienza con una pregunta del bodhisattva Flor Reina de las Constelaciones acerca de la vida del renombrado bodhisattva Rey de la Medicina. Todas las emanaciones de Shakyamuni han sido dispersadas, y los budas bajo árboles enjoyados con sus vastos séquitos de innumerables mundos han retornado a casa. Los personajes han vuelto a su escenario familiar. Esta es la primera pregunta desde los sucesos en el Aire. El dubitativo –pero sincero– espíritu de búsqueda de este novel bodhisattva aparece brillante en el texto del sutra.
   En esa época, el bodhisattva Flor Reina de las Constelaciones le habló al Buda, diciendo: “Honrado por el Mundo, ¿cómo es que llegó y continuó el bodhisattva Rey de la Medicina al mundo saha. Honrado por el Mundo, este bodhisattva Rey de la Medicina ha realizado cientos, miles, decenas de miles, millones de nayutas de prácticas arduas y difíciles. Muy bien, Honrado por el Mundo, podría pedirle que explique un poco? Los seres celestiales, dragones, dioses, yakshas, gandharvas, asuras, garudas, kimnaras, mahoragas, seres humanos y no humanos, y los bodhisattvas que han llegado de otras tierras y la multitud de los que escuchan la voz, todos se deleitarán por escucharlo” (The Lotus Sutra, cap. 23, pág. 280).
   En respuesta a esta pregunta, Shakyamuni explica que en muchas existencias del pasado, existió un buda llamado El Que Así Llega Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna. Shakyamuni alaba todos los atributos de este buda como dignos de ofrecimientos. Él tuvo ochenta millones de bodhisattvas como discípulos. Entre ellos, estaba un bodhisattva llamado Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes, quien se deleitaba especialmente en la sabiduría del Sutra del Loto y lo aplicaba asiduamente en su práctica. Comprendiendo el beneficio de esta práctica, Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes utilizaba los poderes que había obtenido para manifestar los ofrecimientos para su mentor, el buda Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna. Pero todavía sentía que esto no expresaba plenamente el alcance de su aprecio por la Ley y el Buda, de manera que decidió ofrecer su propio cuerpo. A lo largo de un  período de mil doscientos años, se preparó con una gran cantidad de perfumes y aceites. Luego se prendió fuego. Las llamas iluminaron mundos en una cantidad mayor que los granos de arena de ocho millones de ríos Ganges. Los budas de todos esos mundos se maravillaron ante su acción y expresaron su acuerdo en que los ofrecimientos de uno mismo son los mayores que se pueden ofrecer al Buda. Su cuerpo ardió por otros mil doscientos años.
El bodhisattva Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes renació inmediatamente en la tierra de un rey llamado Virtud Pura, quien también vivía en las tierras de El Que Así Llega Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna. Después de su renacimiento, este bodhisattva habló a su padre acerca de sus recuerdos de sus pasadas prácticas bajo el buda Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna, diciéndole que este Buda todavía existía en esa misma tierra. Inmediatamente, él buscó al buda Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna y lo involucró en un misericordioso diálogo.    
   También ocurrió que en esa época, el Buda estaba por entrar en la extinción. Con la alegría de volver a encontrarse con el bodhisattva Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes, El Que Así Llega Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna le confió sus enseñanzas, sus discípulos y sus reliquias a este bodhisattva. Con el bodhisattva Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes velándolo, el buda Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna entró en el nirvana.
   El buda Shakyamuni explicó a la asamblea que el bodhisattva Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes no es otro que el actual bodhisattva Rey de la Medicina. También les dice que un importante significado de esta historia era mostrar que la devoción sincera a un Buda que predica el Sutra del Loto es infinitamente más valiosa que el ofrecimiento de un masivo número de reinos de tesoros o mundos enteros a otros budas. Refiriéndose a alguien que hace tales ofrecimientos a una enseñanza inferior, Shakyamuni dice, “los beneficios obtenidos por esa persona no pueden compararse con los obtenidos por aceptar y mantener este Sutra del Loto, ¡ni siquiera a un verso de cuatro líneas de él! Éste es el que atrae los beneficios más numerosos” (The Lotus Sutra, cap. 23, pág. 285).
   El “Diálogo sobre el Sutra del Loto” hace notar que la motivación que impulsaba a Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes era retribuir su deuda de gratitud a la fuente de su felicidad y beneficios. Como dice el presidente Ikeda:
   Lo que ilumina el mundo es la sinceridad con la cual deseaba retribuir los beneficios recibidos de su maestro. Nosotros también hemos podido ser felices gracias al Gohonzon. Y a su vez, si pudimos conocer el Gohonzon y desentrañar el camino correcto en la vida, fue gracias a la SGI.
   Si nuestro corazón, en lo más profundo, late con el deseo de retribuir los beneficios recibidos, nuestra buena fortuna no hará más que aumentar y aumentar a raudales. Por mucha acción que alguien despliegue exteriormente, si no tiene la postura de saldar sus deudas de gratitud, toda su buena fortuna acabará destruida a causa de la arrogancia. En consecuencia, será incapaz de transformar verdaderamente su estado de vida. La más sutil diferencia en nuestra actitud profunda o ichinen, produce resultados diametralmente opuestos. (Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 35)
   Al discutir la existencia anterior del bodhisattva Rey de la Medicina (como el bodhisattva Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes), ellos señalan que su gratitud hacia su mentor no disminuyó –aun cuando su cuerpo ardió por mil doscientos años. Y después de su muerte, él pudo renacer en la misma tierra del Buda de su mentor, el buda Virtud Pura y Brillante como el Sol y la Luna. El presidente Ikeda señala el significado de este suceso:
   Su corazón de gratitud atraviesa la vida y la muerte. Ha resuelto que, después de la muerte, regresará nuevamente junto a su maestro para seguir luchando. Ya que ha logrado un estado que le permite manifestar todas las formas físicas, puede escoger exactamente el lugar donde renacer. Los que se dedican a la fe en la Ley Mística sin especulaciones son personas absolutamente libres. (Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 35)
   Con el tema del sacrificio de la propia vida por la Ley, la discusión en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto”, de manera natural, se dirigió al tema del primer presidente de la  Soka Gakkai, Tsunesaburo Makiguchi.
   El capítulo “Rey de la Medicina” esencialmente expone la fe de “dedicar la vida a la Ley”. Recuerdo que mi maestro, Josei Toda, siempre describía la muerte del presidente Makiguchi en prisión como “la ofrenda del bodhisattva Rey de la Medicina”.
   El señor Toda dijo: ¿Por qué una persona de virtudes tan nobles como el maestro Makiguchi tuvo que morir en prisión? Si no hubiera sido un devoto del Sutra del Loto, jamás habría tenido un destino semejante.
   Él dio la vida por el Sutra del Loto; su existencia da ejemplo de lo que significa dedicar la vida al Sutra del Loto aun enfrentando a la persecución. El presidente Makiguchi merece las palabras de alabanza (empleadas en el sutra para describir la autoinmolación de Rey de la Medicina): ‘Entre todas las donaciones, la suya es la más preciada’ (The Lotus Sutra, cap. 23, pág. 282) (Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 36)
   Shakyamuni explica que así como Contemplado con Agrado por Todos los Seres Vivientes ejemplificaba la mayor de las devociones, así, también, el Sutra del Loto es el primero de todos los sutras. Él continúa dando ejemplos de la buena fortuna que se obtiene cuando uno lleva a cabo la práctica tal como instruye este sutra. Uno de tales méritos es que la facultad de la visión se aclarará y purificará, y la persona podrá percibir a los budas en cantidades inimaginablemente vastas e incluso más allá que ver el universo entero.
   Mientras continúa, pareciera que está reiterando sus pronunciamientos de los capítulos anteriores. Sin embargo, hace un marcado cambio para advertir a sus oyentes de las dificultades que afrontarán quienes propagan el Sutra del Loto después de su muerte y cómo deben protegerse. Habrá ejércitos de demonios,  ladrones, bandidos y otros malvados que tendrán que ser derrotados para tener éxito en la propagación. Mientras Shakyamuni se dirige al bodhisattva Flor Reina de las Constelaciones acerca de la dura realidad que se tendrá que afrontar en el futuro, repentinamente le confía la responsabilidad de mantener el espíritu de este capítulo. Apenas si se puede imaginar los sentimientos que atravesaban la vida de este bodhisattva al recibir esta asignación. Después de todo, él sólo había hecho una pregunta acerca de los asuntos pasados del notable bodhisattva Rey de la Medicina:
Por esta razón, Flor Reina de las Constelaciones, os confío este capítulo de los Asuntos pasados del bodhisattva Rey de la Medicina. Después de que haya pasado a la extinción, en el último período de quinientos años, debéis propagarla [a la Ley] ampliamente en otras tierras, a través del territorio de Jambudvipa, y jamás permitir que cese su corriente; y no debéis dejar que saquen ventaja las funciones perversas, las personas al servicio de funciones perversas, ni los seres celestiales, dragones, yakshas o kumbhandas.
   Flor Reina de las Constelaciones, debéis utilizar tus poderes trascendentales para defender y proteger este sutra. ¿Por qué? Porque este sutra proporciona la buena medicina para todos los males de las personas de Jambudvipa. Si una persona que cae enferma puede escuchar este sutra, su enfermedad será extirpada y ella no sabrá de envejecimiento ni de muerte. (The Lotus Sutra, cap. 23, pág. 288)
   El presidente Ikeda reitera el pasaje del sutra donde Shakyamuni está explicando a Flor Reina de las Constelaciones acerca del beneficio de propagar la Ley Mística.
   “En otras palabras, la buena fortuna y los beneficios de las personas que llevan a cabo la práctica de la propagación no pueden ser destruidos por el fuego del sufrimiento ni barridos por las aguas de la desventura. Este fragmento también dice que el beneficio de alguien así es tan grande, que ni siquiera mil budas hablando todos juntos podrían describirlo acabadamente. La persona ha destruido todos los males y ha quebrado las fuerzas del sufrimiento del nacimiento y la muerte, y ha vencido a todos los enemigos. Cientos y miles de budas la protegerán valiéndose de sus poderes trascendentales.
   “El Budismo es victoria o derrota. Es una lucha entre el buda y la función del mal fundamental. Por tratarse de una contienda, debemos triunfar. Uno puede ser realmente feliz y lograr el kosen-rufu sólo cuando logra una victoria mediante la fe. Otro de los apelativos del Buda es ‘El Vencedor’” (The Living Buddhism, febrero de 2000, pág. 37).
   Sentado en medio del desigual terreno del Pico del Águila, alguien como Flor Reina de las Constelaciones podría preguntarse de dónde provendrían esos mil budas cuando fuesen necesarios. Pero entonces habla una voz familiar:
   El Que Así Llega Muchos Tesoros, sentado en medio de su Torre de los Tesoros, alabó al bodhisattva Flor Reina de las Constelaciones, diciendo: “Excelente, excelente, Flor Reina de las Constelaciones. Lograste adquirir inconcebibles beneficios y así pudiste preguntar al buda Shakyamuni acerca de este asunto, beneficiando a una inmensurable cantidad de seres vivientes, (The Lotus Sutra, cap. 23, pág. 289)
   En verdad, el Sutra del Loto es un cuento misterioso. Aquí hemos sido conducidos a la creencia de que la Ceremonia en el Aire se ha dispersado. No obstante, encontramos que El Que Así Llega Muchos Tesoros y su intergaláctica Torre de los Tesoros todavía están suspendidos en el aire en apoyo de su querido amigo Shakyamuni

CAPÍTULO VEINTICUATRO. “EL BODHISATTVA SONIDO MARAVILLOSO”. (DLS 47)
   Todavía más sorpresas nos aguardan cuando encontramos al bodhisattva Sonido Maravilloso. Este capítulo comienza con Shakyamuni emitiendo un rayo de luz que brota de la unión de sus cejas, e ilumina las tierras del Buda de una insondable cantidad de mundos situados en dirección al este del universo. Más allá de estas palabras, allí vivía un buda llamado Sabiduría del Rey Constelación de la Flor Pura. Llegando a la tierra de ese Buda, la luz pura de Shakyamuni ilumina a un bodhisattva Sonido Maravilloso. Él ha servido a millones de budas y gana la sabiduría de un bodhisattva con múltiples talentos. Él tiene un tamaño inmenso, cuarenta mil yojanas4 de altura. Como un punto de referencia, la Torre de los Tesoros, que tiene un cuarto del tamaño de la tierra, mide apenas quinientos yojanas de altura. Cuando la luz de Shakyamuni llega al bodhisattva Sonido Maravilloso, éste le informa a su mentor, Sabiduría del Rey Constelación de la Flor Pura, que tiene que ir a visitar al Honrado por el Mundo, quien está predicando el Sutra del Loto.
   Escuchando esto, El Que Así Llega Sabiduría del Rey Constelación de la Flor Pura, cuyo cuerpo tiene seis millones ochocientos mil joyanas de altura, advierte al bodhisattva Sonido Maravilloso que no menosprecie el mundo de Shakyamuni ni a los seres que lo habitan. Él le explica que el mundo saha no necesariamente es un lugar hospitalario. Los seres que allí residen, incluyendo a Shakyamuni, son menudos en estatura comparados con los que viven en la tierra del buda Sabiduría del Rey Constelación de la Flor Pura. En verdad, el cuerpo del bodhisattva Sonido Maravilloso es mucho más grande que la tierra misma y posee lo máximo en elegancia, adornos y brillantez. Escuchando esto, el bodhisattva Sonido Maravilloso le asegura a El Que Así Llega Sabiduría del Rey Constelación de la Flor Pura que irá a ese mundo para rendir homenaje sincero a Shakyamuni por todos sus esfuerzos para llevar la iluminación a todos los seres vivientes mediante la prédica del Sutra del Loto.
   El bodhisattva Sonido Maravilloso hace que aparezcan ochenta y cuatro mil flores de loto enjoyadas que poseen tallos de oro puro al lado del sitio donde Shakyamuni está predicando a su audiencia en al Pico del Águila. Esto hace que el Príncipe del Dharma, el bodhisattva Manjushri pregunte al Buda acerca del significado de este fenómeno.   
   Shakyamuni responde que esta es la carta de presentación del bodhisattva Sonido Maravilloso y que él estará visitándolo muy pronto. Manjushri y los demás bodhisattvas están sorprendidos y quieren saber las causas por las que Sonido Maravilloso hizo que sea posible la demostración de tales presagios. Shakyamuni pide a El Que Así Llega Muchos Tesoros que actúe como intermediario para permitir que Sonido Maravilloso se manifieste. Muchos Tesoros le habla a Sonido Maravilloso, “¡Ven, buen hombre! El Príncipe del Dharma, Manjushri desea ver tu cuerpo”. (The Lotus Sutra, cap. 24, pág. 293)
   En ese momento, el bodhisattva Sonido Maravilloso desaparece inmediatamente de su tierra y viaja al mundo saha con un séquito de ochenta y cuatro mil bodhisattvas.
   Toda la asamblea se regocija ante la magnífica apariencia del bodhisattva Sonido Maravilloso. Ellos no habían visto nunca nada parecido. Comentando acerca de la apariencia de este bodhisattva, los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto“expresan su propio asombro por el tamaño y la magnificencia del bodhisattva Sonido Maravilloso. El presidente Ikeda explica que el propósito de su visita es mostrar su espléndida forma a la gente de este mundo. Él es la personificación viviente del “sonido maravilloso” que reverbera a través de todo el universo. Es la riqueza de sonido, fragancia y luz que tiene su base en el dinámico pulso de la vida misma con su ritmo inherente que puede transformar cualquier sufrimiento en una inmensa alegría. El presidente Ikeda explica que es el sonido del universo:
   Todo el universo está interpretando un “sonido maravilloso”. El universo es, en sí, una sinfonía de vida, una obra coral cantada por todos los seres y todos los fenómenos: es una serenata, un nocturno, una balada, una ópera, una suite... El universo interpreta “sonidos maravillosos”.
   La base de todo esto es la Ley Mística; es Nam-myoho-renge-kyo. Por lo tanto, el gongyo es, básicamente, un “canto del despertar”, que hace salir el sol en nuestro corazón. Y también es una “serenata nocturna” que ilumina nuestra alma con el fulgor de la luna llena.
   Recitar el sutra es como leer un poema. E invocar daimoku es como interpretar una obra maestra musical. Nuestra práctica diaria es una actividad de naturaleza innegablemente cultural. (Living Buddhism, marzo de 2000, pág. 31)
   Sin embargo, todavía hay más por aprender de la visita de esta sorprendente criatura. Shakyamuni prosigue narrando la historia completa de este gran bodhisattva y sobre cómo ha hecho ofrecimientos y servido a una inmensurable cantidad de budas.    
   El presidente Ikeda aclara esto enfocando la práctica dentro de la SGI:
   La declaración de que ha servido al Buda es muy importante. Desde nuestro punto de vista, significa venerar el Gohonzon firmemente. En otro nivel, significa prestar servicio y apoyo a los miembros de la SGI que están actuando por el kosen-rufu, o simplemente reunirse con los compañeros de fe. A través de esta clase de acciones, podemos incrementar nuestra fuerza vital y expandir nuestro estado de vida. (Living Buddhism, marzo de 2000, pág. 32)
   Conforme avanza la narración, Shakyamuni explica que el bodhisattva Sonido Maravilloso tiene la capacidad para manifestarse en cualquier forma para comunicar exitosamente la Ley a todos los seres. Él enumera específicamente treinta y cuatro formas que emplea este bodhisattva como las de rey, hombre acaudalado, amo de casa, monje, monja o mujer laica. El presidente Ikeda comenta sobre la capacidad del bodhisattva Sonido Maravilloso para adaptarse a las necesidades y circunstancias de cada persona:
   El bodhisattva Sonido Maravilloso es completamente libre de adecuarse a la capacidad de las demás personas. Esto es la total liberación de todo impedimento, interno o externo. El Budismo no es una religión que pretende ajustar a la gente dentro de un molde, ni crear autómatas. Al contrario, emancipa la vida de aquellos que viven constreñidos.
   Las treinta y cuatro formas del bodhisattva Sonido Maravilloso demuestran la rectitud de las múltiples actividades que están llevando a cabo los miembros de la SGI, en todos los sectores de la sociedad. Cada uno de nosotros está haciendo algo distinto, en su propio lugar, pero a todos nos motivan el humanismo y la solidaridad profunda.  
   ¡Debemos arder con el espíritu de ser los mejores aliados de todos aquellos que están sufriendo! Si no tenemos este espíritu, no estamos comportándonos como el bodhisattva Sonido Maravilloso. (Living Buddhism, marzo de 2000, pág. 41)

NOTA
Yojanas: Una unidad de medida en la India antigua, equivalente a la distancia que el ejército real podía recorrer en un día.

CAPÍTULO VEINTICINCO. “EL PÓRTICO UNIVERSAL DEL BODHISATTVA QUE PERCIBE LOS SONIDOS DEL MUNDO” (DLS 48/49)
   Siguiendo a la partida del bodhisattva Sonido Maravilloso, parece no haber fin para el espíritu de búsqueda de la asamblea. El bodhisattva Propósito Inextinguible no pierde tiempo saltando de su asiento para preguntarle a Shakyamuni acerca de otro gran bodhisattva: “Honrado por el Mundo, este Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo, ¿por qué se llama así?” (The Lotus Sutra, cap. 25, pág. 298). Shakyamuni responde con prontitud:
   “Buen hombre, suponed que hay innumerables cientos, miles, decenas de miles, millones de seres vivientes que están soportando diversas tribulaciones y sufrimientos. Si ellos escuchan de este Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo y sinceramente pronuncian su nombre, entonces al momento él percibirá el sonido de sus voces y todos ellos se liberarán de sus aflicciones. (The Lotus Sutra, cap. 25, pág. 298-99)
   Shakyamuni cita muchos ejemplos respecto a cómo el Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo podrá escuchar y responder a las oraciones de quienes están sufriendo. Él también explica el gran beneficio de quienes ofrecen limosnas y reverencia a este bodhisattva. Todos obtendrán inmensurables beneficios. El hecho de que un bodhisattva escuche sus clamores y aparezca para aliviar el sufrimiento de la humanidad parecería ir en contra del espíritu del Sutra del Loto que enseña la confianza en sí mismo. Es una enseñanza de desafío a los sufrimientos y creación de la victoria a través de la correcta práctica budista.
   Hay dos puntos de vista que expanden la comprensión de la función de este bodhisattva. Está el ejemplo de una madre misericordiosa que puede escuchar de verdad, de corazón, los sufrimientos de sus hijos y es capaz de confortarlos. Además, esta misericordiosa cualidad es comparada con la posición de la SGI de atesorar a cada miembro y mostrar benevolencia frente a sus sufrimientos para brindarles esperanzas.  
   Así, es el coraje del Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo para persistir en la práctica hasta descubrir el poder de la Ley Mística y de esa manera emprender acciones para salvar a los demás sin escatimar la propia vida.
   El presidente Ikeda explica la capacidad de este bodhisattva para transformar el sufrimiento en victoria y alegría:
   El Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo representa un aspecto de la vida del Buda original desde el tiempo sin comienzo, revelada en el capítulo “Duración de la vida” (dieciséis). Simboliza la benevolencia ilimitada del Buda original, inseparable del universo.
   Por ende, la vida del Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo no está separada del Buda original del remotísimo pasado. Si no fuese así, sería sólo una cáscara inerte. (Living Buddhism, abril de 2000, pág. 32)
   Puede ser de mucha de utilidad recordarnos la tesis expuesta al comenzar la presentación acerca de los “Asuntos pasados del bodhisattva Rey de la Medicina”, en el capítulo veintitrés. Todos los budas provisionales y los bodhisattvas provisionales que aparecen en los seis capítulos finales del Sutra del Loto son ilustraciones de los atributos de quienes practican la Ley Mística. Son atributos utilizados por los Bodhisattvas de la Tierra para cumplir su misión para propagar la Ley a todos los seres vivientes. En las formas provisionales del Budismo no basados en el Sutra del Loto, puede ser más reconfortante pensar en el Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo como una suerte de estupendo ángel de la guarda que llega para arreglar todos los problemas y mantener a la gente a salvo de cualquier daño.
   En el Budismo tibetano clásico, el Dalai Lama es considerado como la reencarnación del Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo. Sin embargo, el presidente Ikeda explica claramente esto:
   El Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo queda comprendido dentro de la vida del Buda original del remoto pasado; es decir, dentro del Gohonzon. La función de El Que Percibe los Sonidos del Mundo es una pequeña parte de los poderes benéficos que tiene el Gohonzon, que tiene la Ley Mística.
   Desde la antigüedad, ningún capítulo del sutra ha sido tan ampliamente analizado como este, “El Que Percibe los Sonidos del Mundo”. Hasta se sabe que algunas personas han abrazado la fe en este capítulo, como si se tratara de un sutra independiente. Hasta el día de hoy, en diversos lugares hay gente que erige estatuas de este bodhisattva. El Sutra Hannya Shin (en sánscrito, prajnaparamitahridaya), que es muy popular en el Japón, adopta la forma de una prédica realizada por El Que Percibe los Sonidos del Mundo.
   Pero, pese a la popularidad del bodhisattva, muchas personas interpretaron mal la fuente de su poder, que, en realidad, es la Ley Mística. En la sección de transmisión del Sutra del Loto –que incluye el capítulo “El Que Percibe los Sonidos del Mundo”–, se exhorta a las personas a propagar la Ley Mística después de la muerte de Shakyamuni.
   De todos los sutras budistas en los cuales aparece el Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo, el más antiguo es el “pórtico universal del Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo”, del Sutra del Loto- Aquí se establece claramente la función de este bodhisattva. El poder del Bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo de guiar a las personas a la iluminación deriva de la Ley Mística; de Nam-myoho-renge-kyo implícito en lo profundo del capítulo “Duración de la vida”. (Living Buddhism, abril de 2000, pág. 32-33)
   El punto final a extraer es el significado del título del capítulo, que se refiere a un “Pórtico Universal”. El significado de la palabra “universal” implica que es un portal por el que cualquiera puede entrar.

CAPÍTULO VEINTISÉIS.“DHARANI”(DLS 50)
   La asamblea entera ha sido sacudida con la aparición de magníficos bodhisattvas. El impacto que causaron en la audiencia el bodhisattva Rey de la Medicina, el bodhisattva Sonido Maravilloso y el bodhisattva Que Percibe los Sonidos del Mundo los ha alentado a manifestar sus propias promesas de proteger valientemente a quienes propagan la Ley después de la muerte del Buda.
   La escena inicial del capítulo veintiséis da la sensación de una conversación que continúa de la conclusión del capítulo “El Que Percibe los Sonidos del Mundo”. En este ejemplo, encontramos al bodhisattva Rey de la Medicina en el rol de interrogador. Él pide al Buda que aclare cuánto mérito y beneficio se puede obtener realizando la práctica del Sutra del Loto.
   En lugar de responder inmediatamente, Shakyamuni lo hace con una pregunta propia. Primero pregunta al bodhisattva Rey de la Medicina si un hombre o mujer hace ofrecimientos a budas iguales en número a las arenas de ochocientos, diez mil millones de nayutas de ríos Ganges, cuál sería su estimado de la cantidad de beneficios que recibirían. Rey de la Medicina expresa el sentimiento de que sería muy grande.   
   Shakyamuni concuerda y luego compara esto con los resultados de mantener siquiera un verso del Sutra del Loto:
   El Buda dijo, “Si hay buenos hombres o buenas mujeres que, con respecto a este sutra, pueden aceptar y mantener aunque sea una estrofa de cuatro versos, si lo leen y lo recitan, si comprenden sus principios y los practican como indica el sutra, sus beneficios serán muchísimos. (The Lotus Sutra, cap. 26, pág. 308)
   Comenzando de esta manera el capítulo, Shakyamuni continúa en su propósito de asegurar que todos entiendan y aprecien que el Sutra del Loto se mantiene aparte y por encima de todas sus otras enseñanzas como el camino hacia la iluminación. La lógica común diría que servir a lo que supone una cantidad infinita de budas produciría muchos más beneficios que el practicar un verso de cuatro líneas de un sutra budista, aunque éste sea el Sutra del Loto. De manera que los participantes en el diálogo expresan su admiración acerca de lo extraordinario que resulta que el aceptar y mantener un simple verso del Sutra del loto, tenga el mismo beneficio que servir a un infinito número de budas. El presidente Ikeda explica que esto es posible porque la fuente de la iluminación de un infinito número de budas es en realidad el mismo Sutra del Loto. Él desarrolla este punto para aclarar lo insondable que resulta el poder del daimoku –la invocación de Nam-myoho-renge-kyo:
   ¿Cómo es posible? La respuesta está en que el Sutra del Loto es la fuente de la iluminación de toda la infinidad de budas del universo. En especial, la fuente de la iluminación de todos los budas es la enseñanza implícita de Nam-myoho-renge-kyo. Este daimoku es la esencia pura y concentrada del sutra.
   Por lo tanto, no intentemos medir el poder del daimoku con nuestro estado limitado de vida, ni pensemos ‘El daimoku se trata de esto y punto’. El sutra dice que el beneficio del daimoku es algo que ni siquiera el Buda puede escrutar. Suponer que podemos capturar en su totalidad el alcance del daimoku es nada menos que arrogancia. Si subestimamos el infinito poder del Gohonzon debido a una fe débil, sólo podremos tomar contacto con una pequeña parte de la fuerza que hay en él. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 35)
   El bodhisattva Rey de la Medicina y los demás presentes en la asamblea quedan más conmovidos cuando escuchan la declaración de Shakyamuni acerca del verdadero beneficio de la práctica del Sutra del Loto. El bodhisattva Rey de la Medicina ofrece un dharani. Un dharani es un conjuro, invocación o fórmula que es pronunciado, y de esa manera beneficia y protege a esa persona, en virtud de su poder místico. En el caso del bodhisattva Rey de la Medicina, él lo estaba ofreciendo a quienes propagarían el Sutra del Loto para que sean protegidos.
   Uno tras otro, los valientes asistentes a la asamblea pronuncian sus dharanis y hacen sus juramentos. Luego, ocurre algo sorprendente. Los seres que han sido considerados como demonios malvados se adelantan para prometer su protección a los practicantes del Sutra del Loto. Las Diez Hijas Demonios, la Madre de las Diez Hijas Demonios y todos sus acompañantes hablan juntos diciendo: Honrado por el Mundo, nosotras también queremos proteger a aquellos que lean, reciten, acepten y mantengan el Sutra del Loto, y alejarlos de todo daño y decadencia” (The Lotus Sutra, cap. 26, pág. 310). Sin embargo, las mujeres demonios van más allá de los simples conjuros. Toman la firme determinación de retribuir severamente a quienes no escuchan sus conjuros. Le dicen esto al Buda en forma de verso:
A las personas que no tengan en cuenta nuestros conjuros,
y que perturben y molesten a los que predican la Ley,
la cabeza se les partirá en siete pedazos,
como ramas del árbol de arjaka.
   Su crimen será como el de aquel que mata a sus padres, o de aquel que exprime aceite, o tima a otros con medidas o escalas, o, como Devadatta, perturba la Orden de los monjes.
   ¡Cualquiera que cometa un crimen contra estos maestros de la Ley atraerán para sí culpas como estas! (The Lotus Sutra, cap. 26, pág. 310)
   Los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” manifiestan su admiración ante la determinación expresada por los miembros de la asamblea. Ellos se admiran, especialmente, de la fuerza de las mujeres para proteger la Ley. El presidente Ikeda aclara el significado de la frase, “A los que no tengan en cuenta nuestros conjuros y que perturben y molesten a los que predican la Ley, la cabeza se les partirá en siete pedazos” que está incluida en la parte superior derecha del Gohonzon.
   Lo que hay que entender con respecto a la retribución “kármica” negativa es que no se trata de algo que alguien nos hace; es el efecto producido cuando actuamos en contra de la Ley. Sin embargo,  cuando vivimos basados en la Ley, recibimos beneficios. Ambos conceptos son correlativos.
   En el extremo superior izquierdo del Gohonzon se leen las palabras: “Los que hacen ofrendas obtendrán una buena fortuna superior a los diez títulos honoríficos [del Buda]”. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 37)
   Utilizando el ejemplo de las Diez Hijas Demonios y su madre, los participantes en el diálogo desarrollan el tema del Sutra del Loto que crea la oportunidad para que los demonios malvados transmigren como deidades benévolas que protegen la Ley. Como dice el presidente Ikeda:
   La Madre de las Hijas Demonios, que atiende amorosamente a sus propios hijos pero nada le importa de los hijos de los demás simboliza el aspecto negativo del instinto maternal. En cambio, extender a toda la humanidad el mismo amor que uno siente por sus hijos es el espíritu de la madre misericordiosa representada por la bodhisattva Percibir los Sonidos del Mundo. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 39)
   El presidente Ikeda explica por qué la protección de los dioses budistas es tan necesaria. Todos los bodhisattvas, incluido Rey de la Medicina, así como la Madre de las Hijas Demonios y sus hijos son representativos de todos los dioses budistas que se han unido para proteger a los devotos del Sutra del Loto:
   ¿Y por qué? ¿Por qué es necesaria la protección? Porque el kosen-rufu es una gran contienda entre el Buda y toda clase de funciones negativas. Este mundo saha es el territorio del rey Demonio del Sexto Cielo. Los “revolucionarios” que, en nombre de la justicia, se ponen de pie y desafían a este “soberano perverso” son budas; son los devotos del Sutra del Loto. Es natural que seamos atacados por las fuerzas del mal. Si dejáramos que el mal persistiera, este mundo continuaría envuelto en las tinieblas.   
   Pero el capítulo “Dharani” señala que los practicantes del sutra serán protegidos de esta hueste del mal, por las fuerzas de un ejército del bien. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 39)
   En los términos del significado del dharani en sí, la palabra incluye las ideas de “defender”, “capaz de interceptar”, “recordar y preservar”, “sostener” o “mantener”.  De esta manera, la entidad de un dharani es algo más razonable que la idea de un conjuro mágico. El presidente Ikeda explica los orígenes de las enseñanzas orales que retroceden al inicio de la historia:
   En las civilizaciones antiguas, las enseñanzas importantes no se registraban por escrito. Era costumbre aprenderlas de memoria y llevarlas siempre en el alma. El significado original de los dharanis era grabar profundamente en la vida las enseñanzas del mentor, para toda la eternidad. En síntesis, es “recordar y llevar seriamente en el corazón”. Es no olvidar las palabras del maestro absolutamente jamás. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 44)
   La preocupación de Nichiren Daishonin era que si bien la gente podía hacer la promesa de practicar, cuando surgen las dificultades, tal como él lo había advertido, olvidaban su promesa. Los participantes relacionan esto con los dharanis agregando que está el “dharani de memorizar todo lo que uno escucha” y otro con el nombre de “dharani de memorizar la repetición de las enseñanzas”. El capítulo “Distinción de beneficios” se refiere a bodhisattvas que “obtuvieron el dharani que les permitió memorizar cientos, miles, decenas de miles, millones de inmensurables repeticiones de las enseñanzas” (The Lotus Sutra, cap. 17, pág. 234). El presidente Ikeda emplea “El registro de las enseñanzas transmitidas oralmente” de Nichiren Daishonin para recalcar la verdad fundamental acerca del dharani:
   El Daishonin señala directamente en el “Registro de las enseñanzas transmitidas oralmente”: “Dharani aquí significa Nam-myoho-renge-kyo” (Gosho Zenshu, pág. 777).   Y sigue diciendo: “Por ende, los dharanis representan palabras secretas de todos los budas”. Está diciendo que es un “lenguaje secreto” que sólo comprenden los budas.
   El Daishonin señala, además, “Los cinco ideogramas del daimoku son las palabras secretas del secreto de todos los budas a través del pasado, presente y futuro”. En otras palabras, son el secreto de todos los secretos.
   Entre los distintos secretos, hay aquellos que esconden defectos o malas acciones; hay otros que ocultan tesoros escondidos. Desde luego, estamos hablando de esta última clase de secretos. Para decirlo simplemente, los dharanis son el epítome de las “palabras imbuidas de espíritu”. No son sólo palabras dotadas de significado, sino impregnadas de energía vital. Por eso, el sonido y el ritmo son tan importantes. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 47)
   En el análisis final, es el poder de la fe del practicante lo que hace posible extraer la protección de los dioses budistas.
   El macrocosmos del universo es una entidad de los cinco caracteres de la Ley Mística, como lo es el microcosmos de nuestra propia vida y como lo son los “dharanis protectores” descritos en el capítulo “Dharani”. Esto significa que nosotros, como devotos de la Ley Mística, recibiremos la protección del universo en la misma medida en que nuestra vida sea vibrante. El universo protege a aquellos cuya vida reverbera de fe ardiente. El gran maestro Miao-lo de la China señala: “Cuanto mayor es la fe, más grande es la protección de los dioses”. Este es un fragmento que el Daishonin cita reiteradamente. (Living Buddhism, julio de 2000, pág. 47)

CAPÍTULO VEINTISIETE. “ASUNTOS PASADOS DEL REY ADORNO MARAVILLOSO”. (DLS 51)
   La historia del rey Adorno Maravilloso añade otra dimensión a la abundancia de beneficios generados por practicar las enseñanzas del Sutra del Loto. Este es el drama de una familia en el que la prueba real de la práctica de dos hijos y la sabiduría de una esposa permiten que un poderoso rey se encuentre con el Buda y comience su práctica del Budismo.
   Shakyamuni presenta la historia que es el tema de este capítulo en su manera usual de establecer el escenario en un incalculable período de tiempo en el pasado. En este caso, había un buda llamado Sabiduría de la Flor del Rey de la Constelación del Sonido del Trueno de la Nube. Su tierra se llamaba Adorno de la Luz Brillante. En esta tierra vivía un rey llamado Adorno Maravilloso. Su esposa se llamaba Pura Virtud. Él tenía dos hijos. Uno se llamaba Puro Recinto de Tesoros y el otro, Pura Visión. Los dos hijos habían estado realizando la práctica de bodhisattva bajo El Que Así Llega Sabiduría de la Flor del Rey de la Constelación del Sonido del Trueno de la Nube.
   El Buda deseaba dar el siguiente paso para asegurar el país, atrayendo al rey Adorno Maravilloso al Budismo y guiando su práctica. Sintiendo que era el momento apropiado, el Buda predicó el Sutra del Loto. Los hijos, Puro Recinto de Tesoros y Pura Visión, estaban conscientes de la trascendencia del evento en la propagación de la Ley. De manera que fueron donde su madre y le suplicaron que fuera al lugar donde el buda Sabiduría de la Flor del Rey de la Constelación del Sonido del Trueno de la Nube estaba predicando. Utilizando su sabiduría de madre, Pura Virtud sabia que el verdadero objetivo de sus hijos era convertir a su padre al Budismo. Por lo tanto, en lugar de ir con ellos a ver al Buda predicando, ella dialogó con sus hijos para que pudieran encontrar la manera apropiada para lograr su meta.
   La madre hizo saber a sus hijos, “Su padre ha puesto su fe en doctrinas no budistas y está profundamente apegado a la Ley brahmanista. Deben ir donde su padre, hablarle acerca de esto, y persuadirlo para que los acompañe”.
Puro Recinto de Tesoros y Pura Visión juntaron las palmas de sus manos y sus diez dedos y le dijeron a su madre, “Somos hijos del Rey del Dharma, ¡y sin embargo, hemos nacido en esta familia de ideas heréticas!”
   La madre le dijo a sus hijos, “Está bien que se preocupen por su padre. Tenéis que manifestar algún prodigio sobrenatural frente a él. Cuando lo vea, su mente se purificará y se limpiará, y entonces nos dejará que vayamos junto al Buda”. (The Lotus Sutra, cap. 27, pág. 313)
   Expresando su misericordia y convicción en lo que habían desarrollado practicando bajo su mentor, ellos hacen una digna demostración de sus poderes a su padre. Los poderes eran increíbles hazañas físicas y lograron conmover el corazón de su padre. Él junta las palmas de sus manos y les pide a sus hijos que lo lleven donde su maestro.                  El presidente Ikeda explica que los poderes sobrenaturales mostrados por los hijos pueden ser considerados como una demostración de su revolución humana.
   “En especial, los familiares necesitan ver pruebas reales, porque son los que más nos conocen. Por muy importantes que aparentemos ser fuera del hogar, nuestra familia es la que conoce la verdad de los hechos. Desde luego, también hay aspectos de nuestra vida que la familia suele ser la última en descubrir...
   “Pero, de todas formas, los padres pueden apreciar el crecimiento de un hijo, así como una esposa sabe muy bien cuándo su marido está cambiando para bien. El equivalente a los “poderes sobrenaturales”, en nuestro caso, es la revolución humana” (Living Buddhism, agosto de 2000, pág. 36)
   Luego de emplear un medio hábil para hacer que su padre busque la Ley budista, Puro Recinto de Tesoros y Pura Visión piden permiso para abandonar su hogar y servir a su mentor. Los hijos llevan a su padre y a su madre a ver al buda Sabiduría de la Flor del Rey de la Constelación del Sonido del Trueno de la Nube. El rey llega con su familia y cuarenta y dos mil acompañantes al lugar donde está predicando el Buda.
   Entonces, el Buda predicó el Sutra del Loto para el Rey. Como dice el sutra, ”En ese momento, ese Buda predicó la Ley para el Rey, instruyéndolo y dándole beneficio y alegría. El Rey estaba soberanamente feliz” (The Lotus Sutra, cap. 27, pág. 315-16).
   El Rey cede su reino a su hermano menor y junto con su familia renuncia a la vida secular para practicar el Budismo. Continuando una diligente práctica del Sutra del Loto de ochenta y cuatro mil años, él alcanza la iluminación. Él se elevó en el aire para dirigirse a su maestro, el buda Sabiduría de la Flor del Rey de la Constelación del Sonido del Trueno de la Nube, para expresar su gratitud por la acción de sus dos hijos para despertar sus raíces de bondad y poder ingresar al camino del Buda. En ese momento, los budas le hablaron acerca del valor de tener buenos amigos. Él dijo:
   Si buenos hombres y buenas mujeres han plantado buenas raíces, y como resultado en existencia tras existencia se ha podido ganar buenos amigos, entonces estos buenos amigos pueden realizar la tarea del Buda... Gran Rey, debes entender que un buen amigo es la gran causa y condición por las que uno es guiado y conducido, y que posibilita ver al Buda para concebir el deseo del anuttara-samyak-sambodhi. (The Lotus Sutra, cap. 27, pág. 317)
   Aparte de ser una enseñanza narrada que muestra la manera en que una familia puede apoyarse mutuamente; revela los profundos y místicos lazos que compartimos con los demás miembros de la familia. Como dice el presidente Ikeda:
   Por ser miembros de una misma familia, compartimos una profunda relación “kármica”. El Daishonin hablaba así de su propia familia. “Hay una profunda causalidad kármica en el hecho de que ellos hayan sido mis padres, y yo, su hijo (The Writings of Nichiren Daishonin, pág. 993). Y  con respecto al matrimonio, dijo: “No sólo es un hecho limitado a esta existencia” (Ibid., pág. 501).
   Ya que hemos formado una familia debido a una profunda relación kármica, deberíamos ayudarnos a ser felices como buenos amigos. (Living Buddhism, agosto de 2000, págs. 41-42)
   Los participantes en el “Diálogo sobre el Sutra del Loto” discuten sobre las dificultades potenciales e incluso el divorcio que ocurre en una familia. Ellos cubren el tema respecto a la manera en que los padres pueden alentar mejor a sus hijos para que practiquen el Budismo. También enfatizan la importancia de mostrar respeto a los miembros de la familia que no practican el Budismo.

CAPÍTULO VEINTIOCHO. “ALIENTO DEL BODHISATTVA DIGNIDAD UNIVERSAL”. (DLS 52/53)
   El capítulo final se inicia con la llegada, desde el este, del bodhisattva Dignidad Universal. Él rinde homenaje a Shakyamuni y le dice que ha estado en la tierra del buda Rey Superior a la Virtud y a la Dignidad Enjoyadas y que en ese lugar tan lejano había escuchado que el Sutra del Loto estaba siendo predicado aquí, en el mundo saha.  
   Él le pide al Buda le predique el Sutra del Loto y explique cómo la gente puede adquirir este sutra una vez que él haya entrado en la extinción. El sutra ya ha terminado veintisiete capítulos. Han ocurrido los eventos más trascendentales. Aun cuando ha llegado el bodhisattva Dignidad Universal al final mismo de la asamblea, el Buda no le hace sentir incómodo. Muy por el contrario, Shakyamuni expone las cuatro condiciones para adquirir las enseñanzas del Sutra del Loto en el futuro después de su muerte.
   El Buda le dijo al bodhisattva Dignidad Universal: “Si buenos hombres y buenas mujeres cumplen cuatro condiciones, cuando El Que Así Llega haya entrado en la extinción, podrán adquirir este Sutra del Loto. Primero, deben ser protegidos y tenidos en cuenta por los budas. Segundo, deben sembrar las semillas de la virtud. Tercero, deben llegar al nivel en que hay certeza de que lograrán la iluminación. Cuarto, deben albergar la determinación de salvar a todos los seres vivientes”. (The Lotus Sutra, cap. 28, pág. 320)
   Los cinco capítulos anteriores (de la porción referida a la transmisión del sutra) han establecido una base para que Shakyamuni pueda hacer sus declaraciones finales acerca de la esencia del sutra y sobre cómo heredarlo. El presidente Ikeda señala que Nichiren Daishonin consideró el capítulo “Aliento del bodhisattva Dignidad Universal como una reiteración de todo lo que ha pasado antes. El presidente Ikeda relaciona las cuatro condiciones con la práctica actual dentro de la SGI.
   “Básicamente, ser ‘protegidos y tenidos en cuenta por los budas’ se refiere a la protección derivada de creer en el Gohonzon, que es la fuente de la iluminación de todos los budas del pasado, presente y futuro. ‘Sembrar las semillas de la virtud’ significa tener fe en el Gohonzon e invocar daimoku por la felicidad de uno mismo y de los demás. Aquí yace la fuente de todo bien. ‘Llegar al nivel en que hay certeza de que lograrán la iluminación’ significa sumarse a una red solidaria de personas que constantemente luchan por avanzar y que determinan no retroceder jamás en la fe.   
   Concretamente, no se puede cumplir con estas condiciones sin ser parte de un cuerpo armonioso de practicantes que mantienen la enseñanza correcta. En los tiempos modernos, tengo la convicción de que uno cumple dichos requisitos cuando vive toda su vida como miembro de esta noble organización que es la SGI. (Living Buddhism, setiembre de 2000, pág. 33).
   Respecto a la cuarta, el presidente Ikeda usa una cita de Josei Toda que expresa la convicción del segundo presidente en que sólo la fe de aquellos que practican en la Soka Gakkai concuerda con el propósito y el espíritu de Nichiren Daishonin. El presidente Toda habló del hecho de que el Daishonin no perdonaría a quienes se esforzaban para destruir a la Soka Gakkai. El presidente Ikeda plantea la pregunta, ¿cómo pudo hacer tan valiente declaración el presidente Toda? Él mismo responde que, “Sólo porque la SGI reúne la cuarta condición del Buda, que es ‘albergar la determinación de salvar a todos los seres vivientes’. Sólo la SGI está llevando a cabo resueltamente el kosen-rufu. (Living Buddhism, setiembre de 2000, págs. 33-34).
   Luego de que Shakyamuni expusiera las cuatro condiciones, el bodhisattva Dignidad Universal hace una extensa y detallada promesa sobre cómo intercederá para proteger a quienes practican. Él hace una referencia específica a la época malvada y corrupta que sigue al último de los cinco períodos de quinientos años después de la muerte del Buda.
   ¡Qué coraje y esperanza debe haber brindado esta promesa a todos los presentes! ¡Cómo debe haber elevado su espíritu!
   El bodhisattva Dignidad Universal llega desde lejos y clama, “¡Yo los protegeré, así es que esfuércense al máximo! ¡No permitan que nada los derrote!”. Este es el significado de la palabra ‘aliento’, que aparece en el nombre del capítulo. (Living Buddhism, setiembre de 2000, pág. 34)
   Escuchando la determinación del bodhisattva Dignidad Universal para abrir el camino para que todos practiquen el Budismo del Sutra del Loto, Shakyamuni añade su propio punto de vista respecto a qué práctica y resultados se harán evidentes después de su muerte. Él describe las causas que han hecho los practicantes, la vida virtuosa que vivirán y el efecto negativo que crearán aquellos que se esfuerzan por impedir el desarrollo de esos practicantes. Admirando el coraje y la determinación de este bodhisattva, Shakyamuni concluye brindándole una clara dirección, “Dignidad Universal, si ves a una persona que abraza y mantiene este sutra, debes ponerte de pie y saludarla desde lejos, y mostrarle el mismo respeto que sentirías frente al Buda...” (The Lotus Sutra, cap. 28, pág. 324)
   Nichiren Daishonin considera estas palabras finales del Buda en el sutra como equivalentes a la “transmisión fundamental”. Estas palabras resumen todo el mensaje del sutra, que fue predicado a lo largo de un período de ocho años. El pasaje dice que se debe venerar a los practicantes que aparecerán en el futuro como si se venerara al Buda. El significado más profundo de esta declaración es que cada persona que practica el Sutra del Loto en el Último Día de la Ley es un Buda. El presidente Ikeda refuerza esto.
   “Este punto es, en sí mismo, el espíritu de todo el Sutra del Loto. Por eso, el Daishonin dice que representa la ‘herencia suprema’. Esto quiere decir que, en el Último Día de la Ley, el Sutra del Loto no tiene ningún significado si uno no venera a Nichiren Daishonin como al Buda.
   “Sobre esta premisa, el Daishonin instruyó que si uno ve a discípulos que mantienen un vínculo de fe directo con el Daishonin y que se consagran al kosen-rufu, debe ‘ponerse de pie y saludarlos desde lejos, y mostrarles el mismo respeto que sentiría frente al Buda’”. (Living Buddhism, setiembre de 2000, pág. 39)

CONCLUSIÓN
   El “Diálogo sobre el Sutra del Loto“ ha sido una increíble jornada a lo largo de cincuenta y tres entregas con el presidente Ikeda conduciendo al grupo en un viaje a la esencia misma del Budismo. Desde este increíble panorama, hay algunos temas principales que han surgido y es preciso subrayar en la conclusión de este resumen del Sutra del Loto de veintiocho capítulos de Shakyamuni.
   El primero es que el Sutra del Loto es la enseñanza de la vida eterna que es accesible a todos. Es la revelación de la verdadera causa para que todos los seres vivientes alcancen la iluminación. Es la enseñanza que da lugar a una ilimitada esperanza. Como dice el presidente Ikeda:
   Este momento es kuon ganjo, el tiempo sin comienzo. Este mismo momento es el “comienzo”. El pasado ya no existe. El futuro todavía está por verse. Lo único que existe es el momento actual.
   Y el presente, en un instante, se convierte en pasado. Así que existe, en la medida en que postulemos su existencia. Pero si planteamos que el presente no existe, en ese caso no existe. He aquí el significado de la no sustancialidad. La vida,  en estado de no sustancialidad, perdura de instante a instante. Fuera de este “momento”, la vida no tiene realidad. En “un instante” sentimos felicidad; al instante siguiente, nos sentimos desdichados.
   Ver este momento de la vida como efecto directo de alguna causa hecha en el pasado es pensar desde el punto de vista del Verdadero Efecto. En otras palabras, es pensar: “Yo hice esto, y por ese motivo sucedió esto otro...”. Pero esta perspectiva, por sí sola, no basta para generar esperanza.
   La clave está en considerar nuestra vida, en el momento actual, como la "causa" para crear efectos futuros. Esta es la Verdadera Causa que llega a lo más profundo de nuestro ser. No es una causa superficial.
   Verticalmente, nuestras vidas echan raíz en la vida del tiempo sin comienzo.   
   Horizontalmente, son la Verdadera Causa que impregna todo el mundo del dharma.   
   Esto es Nam-myoho-renge-kyo, la gran vida eterna, la gran ley, que mueve el universo entero y genera un desarrollo constante.
   Por ende, cuando creemos en el Gohonzon como corporificación de dicha Ley, cuando nos fusionamos con la Ley Mística y desde ese lugar emprendemos la acción, en ese momento estamos experimentando el tiempo sin comienzo. Y es entonces cuando brota e irrumpe la fuerza vital eternamente pura e ilimitada que “no es creada ni tiene artificios, sino que conserva su estado primigenio” (Gosho Zenshu, pág. 759).   Así, gozamos de una libertad absoluta, tanto en el presente como en el futuro. El Budismo de Nichiren Daishonin es el “Budismo de la esperanza”.
El Sutra del Loto es inapreciable, porque en sus profundidades, es el Gohonzon. Si nos olvidamos de este punto, todo nuestro esfuerzo no servirá de nada. (Living Buddhism, octubre de 2000, pág. 32)
   El Sutra del Loto y el Budismo de Nichiren Daishonin no son enseñanzas de iluminación solitaria o de felicidad personal solamente. Una y otra vez Shakyamuni recuerda a la asamblea que el sutra está siendo predicado para que todos los seres sean felices y se realicen. En el movimiento de la SGI esto se llama kosen-rufu. Como dice el presidente Ikeda:
   El kosen-rufu es, de por sí, el corazón del Sutra del Loto. Es el ritmo de la gran vida que es Nam-myoho-renge-kyo. Es la lucha por elevar el estado de vida de toda la humanidad en dirección al estado de Buda.
   Aunque queramos que el tiempo se detenga, lo cierto es que avanza incesantemente. El invierno siempre se convierte en primavera. De la misma forma, la humanidad siempre se está moviendo en dirección al manantial de la vida que es la Ley Mística, siempre se está moviendo en dirección al estado de Buda. El máximo honor como ser humano reside en poder asumir nuestra responsabilidad e impulsar este movimiento. (Living Buddhism, octubre de 2000, pág. 39)
   La afirmación de Karl Marx de que la “religión es el opio del pueblo” plantea la pregunta respecto a cuál es el propósito de la religión. No todas las religiones funcionan como el opio para drogar la conciencia. Existen religiones que se esfuerzan para despertar al pueblo. En el Budismo de Nichiren Daishonin, el propósito es hacer que la “flor de la Ley” florezca en el corazón de cada ser humano. Sin embargo, en algunos casos, las religiones que originariamente comenzaron con un propósito puro, con el tiempo han sucumbido a la corrupción.
   El presidente Ikeda explica que el espíritu de la relación mentor y discípulo es el único seguro verdadero para impedir que esto suceda. El presidente Ikeda dice:
   Sería terrible que este espíritu desapareciera de la SGI. ¿Cuál es el significado de la inseparabilidad de mentor y discípulo, dentro del Budismo? Físicamente, por supuesto, el maestro y el sucesor son dos entidades distintas. Pero ambas son inseparables en el corazón, en el espíritu, en la postura con la cual uno y otro mantienen y practican la Ley. Por ende, es importante buscar un maestro que practique correctamente la Ley, y avanzar con el objetivo de compartir ese mismo espíritu del maestro.
   Una relación que no se basa en la Ley o en el corazón; un lazo en el cual uno sigue ciegamente las órdenes del otro; un vínculo vertical de superior a subordinado, donde uno se dice discípulo, pero sólo formalmente, no constituye el camino auténtico del Budismo.
   El Budismo postula que el discípulo asuma el mismo espíritu que su mentor en cuanto a avanzar sin límites ni restricciones hacia el kosen-rufu. (Living Buddhism, octubre de 2000, pág. 40)